Renán Barrera deja el Ayuntamiento de Mérida sin aclarar pendientes

Parques inundados, el casi millón de pesos en decoraciones, así como el Paso Deprimido, son algunos de los pendientes que deja el edil
jueves, 8 de abril de 2021 · 11:01

En sesión extraordinaria que se efectuará este jueves a las 11:30 horas, el alcalde Renán Barrera Concha solicitará licencia ante el Cabildo meridano para separarse de su cargo de manera indefinida, para buscar la reelección.

Esto lo hace sin aclarar el gasto de 959 mil 582 pesos de la compra de 16 “figuras decorativas”, de las que se desconoce su utilidad, así como en qué lugares públicos fueron instaladas y para qué fines, ya que el contrato que firmó no detalla ninguno de estos puntos.

Como hemos informado, en un concurso por invitación, la empresa “TrafficLight de México” S.A. de C.V., “reunió las condiciones de precio, requeridas en las bases”, por lo que se adjudicó la partida única, por un importe total de un millón de pesos, para un máximo de tres lotes con diferentes piezas decorativas.

De éstas, el contrato detalla los formatos, pero no especifica para qué son, ni qué función tendrán, pues sólo señala que la Dirección de Servicios Públicos Municipales del Ayuntamiento de Mérida le indicaría al proveedor los lugares donde realizaría dicho suministro e instalación de las figuras.

En su momento se le solicitó una entrevista a la Dirección de Comunicación Social, a cargo de Alicia Triay, y hasta el momento no se ha obtenido respuesta.

Por su parte, el presidente de la Cuenta Pública, Transparencia y Anticorrupción del Congreso del Estado, Alejandro Cuevas Mena, solicitó la intervención de la Auditoria Superior del Estado de Yucatán (ASEY), a fin de esclarecer el caso.

Indicó que le parecía vergonzoso el caso y consideró que se trata de un hecho que deberá atender la ASEY.

“Se trata de un escándalo más del alcalde Barrera Concha, el “Pinocho”; creo que son estatuas a su ego, monumentos a su imagen que sus asesores le debieron impedir poner en la ciudad”, sentenció.

De igual forma, la regidora del Partido Revolucionario Institucional (PRI), Ana Gabriela Aguilar Ruiz, demandó que el Ayuntamiento de Mérida y el alcalde Renán Barrera Concha, rindan cuentas acerca del pago de cerca de un millón de pesos por 16 figuras decorativas, así como del destino de las mismas. Además, que se transparente en qué términos se hizo la asignación para comprar dichos materiales a una empresa que, de acuerdo a la información tiene un historial negro.

“El tema se debe revisar y aclarar. Al interior del Ayuntamiento hay un procedimiento que se debe realizar y, ante estas evidencias y el cuestionamiento que se ha hecho, las autoridades ya deberían haber aclarado de qué se trata, si existen los adornos, dónde se colocaron, en qué se gastó cerca de un millón de pesos”, apuntó.

Peligro en los parques

Además, la ciudadanía sigue reclamando por mejoras y seguridad de los espacios públicos y parques donde en los últimos meses han ocurrido fallecimientos de jóvenes (entre ellos, menores de edad), de los que nadie se hace responsables.

Como el caso del menor U.M.B., de 17 años de edad, quien falleció a finales de marzo en el parque del fraccionamiento Juan Pablo II al colgarse de una portería y que ésta le cayera encima.

El abogado Javier Cabral Vermont ha considerado que estos hechos podrían tener repercusiones de índole penal y civil para el Ayuntamiento, el Cabildo e incluso para el alcalde Renán Barrera Concha, ya que la familia podría demandar en primera instancia a las autoridades municipales encargadas de la construcción y mantenimiento de los espacios públicos por el delito de homicidio culposo, al haber presuntamente alguna negligencia por parte de los funcionarios que pudieran haber ocasionado el accidente.

A este lamentable hecho hay que sumarle el del joven que se ahogó en el parque hundido de la colonia San José Tecoh, el cual debía estar cerrado por las inundaciones que dejaron las intensas lluvias ocasionadas por la tormenta tropical que azotaron a la Entidad a mitad del 2020.

Otro de los casos más recordados en el 2019, fue el de un joven futbolista que murió en el parque de la colonia Maya, al recibir una descarga eléctrica como consecuencia de un cable pelado de un poste de alumbrado público.

La misma situación de peligro denunciaron los vecinos del Oriente de la ciudad, con el Acuaparque, donde por la falta de vigilancia podría ocurrir un accidente fatal.

Un empleado del Ayuntamiento de Mérida, que habló de forma anónima, comentó que, aunque el agua ha estado bajando en los últimos días, no espera que el lugar se seque en un mes. Por lo que existe la posibilidad de que el sitio siga inundado cuando retornen las lluvias con la temporada de huracanes 2021, que inicia en junio próximo.

El entrevistado indicó que, en un principio, el nivel del agua alcanzó los tres metros de altura y aunque ha ido bajando, explicó que es perceptible el descenso de un metro y medio aproximadamente, motivo por el cual se restringió el paso. Aunque la realidad es que muy pocas personas lo respetan porque no hay vigilancia de un guardaparques. Humberto Balam, vecino del lugar, comentó que el sitio está descuidado por la cantidad de agua acumulada. Las canchas están inundadas, no se puede hacer nada, incluso los árboles se están muriendo porque se están pudriendo las raíces.

Paso Deprimido: la obra eterna

El Paso Deprimido es uno más de los pendientes que dejará Renán Barrera, asunto que arrastra y no de esta última administración, sino de la primera, cuando se debieron hacer las reparaciones pertinentes, luego que volviera a quedar inundado por las tormentas tropicales y ciclones del año pasado, y en la que se han invertido 80 millones de pesos en composturas, señaló el regidor Fausto Sánchez López.

“El alcalde se ha caracterizado por tener doble moral y discurso a lo largo de su gestión, pues cuando opina de esta vía, decía que era una porquería, ya que fue creada por una administración priista”, comentó en su momento.

Añadió que con los 80 millones gastados en reparaciones y los 30 millones para componer esa vía, son más de 110 millones de pesos que el municipio terminará invirtiendo, precio demasiado elevado de no haber actuado a tiempo.

En 2013 se repararon las rejillas, se hizo mantenimiento en nivelación y reparación de filtrantes. Duró dos semanas cerrado por carril: el costo fue de 700 mil pesos.

En enero del 2014 se cerró el tránsito vehicular debido a las lluvias atípicas que incrementaron el nivel del manto freático. Mientras que, en junio, se clausuró por mantenimiento y reparación de líneas de desagüe y achique de bombas. El costo fue de 300 mil pesos.

Un año después, se dio mantenimiento a las cuatro bombas, se invirtieron 200 mil pesos.

Por altos consumos de energía, se operó automáticamente el electro-nivel de forma continua. El costo fue de 9.36 millones de pesos.

El año pasado se cerró la vialidad por la inundación causada por las tormentas Amanda y Cristóbal, que hicieron subir el nivel del agua hasta 1.87 metros, ocasionando que las bombas y el sistema eléctrico se dañen severamente. Se desalojaron cerca de cuatro millones de litros de agua y se trabajó con cuatro bombas de achique para recuperar las dañadas. Se observaron grietas en la superficie de rodamiento; el gasto fue de 760 millones de pesos.

Hasta la fecha se mantiene cerrado por los diversos daños en la superficie de rodamiento ocasionados por la supresión que genera el nivel actual del manto freático, misma que está fracturada hasta un 50 por ciento de la superficie de concreto hidráulico.

SY