Empresas redoblan esfuerzos para evitar contagios ante aumento del turismo en Yucatán
Sector turístico espera que a pesar de la afluencia de visitantes nacionales y extranjeros no aumenten los casos de coronavirus, por lo que intensifican los protocolos de sanidad
A casi nueve meses de la presencia de la pandemia del coronavirus en la entidad, el sector turismo se va recuperando a paso lento, pero firme, como resultado del trabajo conjunto entre prestadores de servicios y las autoridades del ramo.
Uno de los segmentos de la producción que se vieron afectados por la parálisis de las actividades productivas en el estado, a finales de marzo, cuando se registraron los primeros casos de COVID-19, sin duda fue el sector turismo cuya actividad cayó casi a cero, especialmente la actividad hotelera, por ser la última en el proceso de reapertura económica, hasta la fecha se mantiene en niveles del 20 al 30% de su capacidad instalada, según el presidente de la Asociación Mexicana de Hoteles y Moteles de Yucatán (Amhmy), Héctor Navarrete Medina.
En marzo de este año, la oferta hotelera era de unas 14 mil habitaciones en casi 500 establecimientos, de los cuales 186 forman parte de la Amhmy distribuidos en 19 localidades, empresas que en principio realizaron grandes esfuerzos por mantener su planta de empleo, la cual se fue recortando conforme la contingencia económica se fue prolongando.
A la fecha a decir de Navarrete Medina se han perdido alrededor de cinco mil empleos y dos de los hoteles emblemáticos de Mérida, como el Holiday Inn y el Continental Internacional Villa Mercedes sucumbieron ante la crisis y sólo éste último buscó alianza ahora con la cadena Hilton, que trabaja en la remodelación del inmueble y se prepara para reabrir el año entrante.
Los agentes de viajes tampoco fueron ajenos a la crisis generada por la terrible enfermedad que hasta ahora ha sigue apagando la vida de miles de personas en la entidad, compañía que también buscan la manera de reactivar la actividad turística ofreciendo atractivas promociones a nivel regional y nacional para atraer más turismo local, porque los turistas extranjeros difícilmente puedan viajar actualmente dadas las condiciones de salud que prevalecen países como Europa, Así, Sur América y América del Norte que representaban los principales mercados para el turismo en México y que también sufren los embates de la pandemia.
Otros prestadores de servicios afectados por la presencia del COVID-19 son los caleceros, los restauranteros, guías de turistas, de transporte terrestre y aéreo.
En ese sentido la secretaria del ramo, Michelle Firdman Hirsh apenas el pasado siete de diciembre informó que se ha logrado recuperar el 69.2% de los vuelos nacionales y el 75% de las operaciones internacionales.
El anuncio lo realizó después de despedir a los 69 pasajeros del vuelo de United hacia Houston, Texas, que llegó el día anterior por la noche, luego de casi siete meses de suspender la ruta, aerolínea que a partir del 15 de este mes comenzará a conectar todos los días a la ciudad de Mérida con esa ciudad fronteriza.
En ese mismo acto se dijo que Volaris comenzará a operar un vuelo pata unir a la ciudad de Oakland con Mérida, por medio de una escala en la ciudad de México a partir del 18 de enero del 2021.
Mientras que Viva Aerobús unirá a Mérida con Villahermosa el 19 de diciembre ampliando a seis los destinos que conecta a Yucatán con el resto del país.
Por su parte, el administrador del aeropuerto internacional de Mérida, Oscar Carrillo Maldonado, dijo que como resultado de las medidas sanitarias que se aplicaron para evitar los posibles contagios de COVID-19 hasta la fecha no se ha reportado ninguna persona infectada tanto en los vuelos de llegada como de salida, como entre el personal que labora en las cinco líneas aéreas, como en los comercios, restaurantes y tiendas de servicios, como entre el personal que labora en los trabajos de remodelación y ampliación de la terminal aérea, para poder recibir a más de cuatro millones de personas por año, es decir, el doble de la capacidad actual.
Sin embargo, como en muchas otras áreas económicas y productivas Asur tuvo que suspender muchas de las actividades sociales y culturales como las exposiciones mensuales en su galería de artes, el tradicional desayuno para el Día de Muertos, los conciertos, el encendido del árbol de Navidad.
CI
