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Por Redacción Por Esto!
12 de Aug de 2020
1 min
Escrito por Redacción Por Esto!
La obesidad y la hipertensión están generando gran preocupación en México ante la pandemia por COVID-19, ya que los jóvenes están siendo afectados por este virus más que en otros países, debido a la mala alimentación a la que está acostumbrado el mexicano.
Según datos de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), México es el país con más sobrepeso y el segundo con mayor índice de obesidad, por tal motivo en un artículo difundido por la Revista Nexos, el médico Rodrigo Bazúa expuso algunos de los problemas alimenticios que se viven en el país, y que han repercutido entre la juventud mexicana que en muchos casos los ha llevado a perder la vida cuando se contagian de COVID-19.
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"Nuestra alta tasa de mortalidad en jóvenes debido al COVID-19 ha hecho evidente que nuestro sistema alimentario nos está matando al hacernos obesos, diabéticos y enfermos. Esta crisis es el momento perfecto para reestructurar nuestro sistema alimentario de manera que la alimentación saludable sea la primera opción. La razón por la que tenemos tanta obesidad y sobrepeso se encuentra muy lejos de nuestros deliciosos tacos y las decisiones que tomamos individualmente, sino más bien en la economía conductual y nuestro sistema alimentario", indicó.
“Muchas de las decisiones que creemos que tomamos todos los días, como qué comer y qué tan saludablemente comer, son tomadas por otros en nuestro lugar incluso antes de que se nos pida que decidamos. Para no convertirnos en gordos, en México tenemos que nadar a contracorriente contra el sistema alimentario y esforzarnos activamente para no ser gordos”, señala Bazúa.
Añadió que uno de los problemas principales no es que a los jóvenes les guste la comida chatarra, sino que en las calles tampoco existen otro tipo de alimentos, al igual que en las tiendas de conveniencia, donde se exhiben galletas, panes, harinas y refrescos como su principal fuente de ventas.
Por ello, Bazúa advirtió que cada persona debe modificar 180 grados su alimentación, pues considera que “la opción predefinida para nosotros en México es ser gordos y poco saludables, y el COVID-19 nos lo está cobrando”.
Medidas recomendadas por el doctor Bazúa
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