Así es el cubrebocas más barato y eficiente que el N95

TechMind es centro de desarrollo de tecnología que se integra por un equipo dedicado al diseño de productos entre los que se encuentran ingenieros, diseñadores y especialistas en negocios. Éste es liderado por su fundador Miguel Huerta, quien además es profesor del Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Occidente (ITESO); Huerta se dio a la tarea de diseñar un cubrebocas con el objetivo de que se le pudiera dar uso de manera indefinida, además de contar con la característica de ser transparente para permitir la lectura labial o de gestos a las personas que lo requieran al comunicarse.

El pasado 10 de julio el profesor e investigador del ITESO publicó en su cuenta de Twitter que, junto a su equipo, está por terminar el proyecto del que detalla que consistirá en material reutilizable, sin riesgo de uso inadecuado, además de contar con la característica de ser tan eficiente como un N95.

Diseñado en México este cubrebocas, además de ofrecer la oportunidad de generar un ahorro entre los consumidores, también da un descanso al medio ambiente que, tras la pandemia se ha visto aún más afectado debido a la gran generación de desechos provenientes de material sanitizante y de protección para contener la propagación de la COVID-19. Hasta el momento, Huerta ha declarado que no busca monopolizar la fabricación de la mascarilla reutilizable, además de hacerla costeable para la gente con un precio objetivo menor a los 50 pesos.

El mencionado proyecto social cuenta con filtros antihumedad, así como con un plástico antiempañante y se contempla que evite el paso del 97% de las partículas, hecho que implicaría que contara con una protección mayor a la ofrecida por las mascarillas N95; cabe señalar que la mascarilla también cuenta con el factor ergonómico que la hace cómoda para sus usuarios.

A sabiendas de que la vacuna contra el coronavirus tardará en desarrollarse, el modelo representa la oportunidad de protegerse a un costo accesible, al tiempo que se promueve el cuidado del planeta. Finalmente cabe señalar que el plástico del que está hecho es antiempañante, haciendo su uso más amigable y la cuarentena más llevadera, así como segura para la población.

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