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Por Luis Manuel Pech Sánchez
Vimos surgir su estrella y hemos venido a adorarlo, así como los Magos de Oriente fueron en la búsqueda del Mesías, hoy cientos de Peregrinos se dieron cita para celebrar junto con los Santos Patronos la Epifanía del Señor.
Este fue el mensaje del arzobispo Gustavo Rodríguez Vega en la solemne ceremonia eucarística que ofició en el Santuario de Reyes abarrotado por millares de habitantes y peregrinos que acuden año con año al encuentro de Gaspar, Melchor y Baltazar en el marco de su santoral.
Concelebrando con el Párroco del Santuario, Pedro José Echeverría López y con Sacerdotes del Decanato XI, en su homilía el máximo líder de la Arquidiócesis de Yucatán expresó que todos los presentes están cumpliendo con la cita con estos hombres misteriosos a quienes se les venera aquí de manera única por ser un pueblo en extremo religioso, ya que en otros lugares no hay esa veneración que se les da a los Reyes Magos como Santos.
Expuso que ellos nos dejan muchas enseñanzas, pues decimos que eran Reyes porque estaba anunciado por los Profetas que iban a acudir a postrarse ante el Señor y porque tenían poder económico para poder realizar un viaje semejante incluso acompañados de sus ejércitos.
También se dice que eran Magos no por el poder de la magia, sino porque eran científicos, hombres de ciencia y estudiosos de sus libros y de otros pueblos, así como de la astronomía.
Pidió que en alusión a ello que los feligreses tengan en cuenta sus semejanzas con los Reyes Magos, pues por el bautismo pertenecen a un cuerpo de Sacerdotes, Reyes y Profetas, que cada uno es llamado a vivir una vida regia como un verdadero hijo de Dios, no menospreciando a nadie, sino reconociendo su dignidad y la de los demás.
Añadió que eran Magos, Científicos y por ende los creyentes todo lo que puedan estudiar en la escuela y niveles educativos todo debe orientarse al Señor, indicando que hay quienes leen algunos libros y ya se sienten con derecho de apartarse de Dios, pero que también hay grandes estudiosos que saben doblar sus rodillas delante del Creador, por eso es necesario conocer más de todas las ciencias porque ellas nos descubren el actuar de Dios, pero también conocer más de nuestra fe porque siempre podemos profundizar mucho de lo que ya creemos para entender más los fundamentos.
Señaló que se inclinaron ante el Niño por más humilde que vieron su casa, su aposento lo reconocieron por la fe y lo adoraron, ejemplificando que los grandes de este mundo también deben adorar al Señor sean poderosos políticamente, económicamente o científicamente, pues quienes gobiernan, quienes dirigen la economía tuvieran la humildad de arrodillarse ante el Señor este mundo fuera mucho mejor de lo que es.
Recordó que ellos acudieron con sus bienes materiales que seguramente le hicieron mucho bien a María y a José por haber llevado el oro con el que pudieron irse a Egipto, huir y establecerse ahí, el incienso que es su reconocimiento como Dios y llevaron también mirra que es una substancia aromática para calmar los dolores, cerrar las heridas, regalos muy simbólicos reconociéndolo como rey, por ello también expuso que están llamados a entregarle al Señor sus bienes, no solo cuando ayudan a la iglesia y a sus ministros o cuando ayudan a los pobres, sino en la vida ordinaria dejando que Dios gobierne su economía y lo que tienen y lo que quisieran tener.
En alusión al incienso con el que viajaron mucho y fueron a países lejanos dijo que no tienen que hacer lo mismo, que todos tienen un templo cercano donde acercarse a adorar al Señor sin tener que viajar lejos llevándole a diario ese incienso que es también para sus hermanos reconociendo sus cualidades y virtudes para reconocer la obra de Dios en ellos, mencionando que cuanta energía pierden en pelear o discutir para ser más o cual persona.
En torno a la mirra externó que la podemos llevar contemplando la cruz de Cristo, llevando el consuelo a los enfermos, a los pobres y a todos los que sufren, concluyó la importancia de imitar a los Reyes Magos como hombres de dignidad y nosotros por el bautismo destinados a ser Reyes, como hombres estudiosos y que también nosotros también podemos estudiar la ciencia y la fe en particular, como hombres generosos y humildes y nosotros también tenemos ese mismo llamado “Sea alabado Jesucristo”, finalizó.
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