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Sin permisos, ni aprobación de la Manifestación de Impacto Ambiental (MIA) de la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), el proyecto “Marela Life”, del empresario Melhem Charruf Navarrete, ya publicita la venta de lotes residenciales en la web a poco más de 6 mil pesos el metro cuadrado, “con financiamiento hasta 60 meses” (seis años).
El lote más barato, de 176 metros cuadrados, tiene precio de venta de un millón 80 mil 640 pesos.
En la Gaceta Oficial de la Semarnat, en el rubro de las MIA y sus dictámenes respectivos, no se halló el proyecto “Marela Life”, que impulsa el empresario Meljem Charruf Navarrete en la costa Norte de Celestún. Podría tratarse de un desarrollo “fantasma” en términos legales, pero que ya está vendiendo los lotes para desarrollo, sin tener la autorización de las autoridades.
Además del daño ecológico, habría un fraude para quienes compren de buena fe, pero que después se toparían con una operación irregular que les impediría construir de acuerdo con sus deseos.
POR ESTO! realizó una búsqueda en las Gacetas de la Semarnat publicadas en el Sistema Nacional de Trámites (Sinat) y confirmó que no hay algún proyecto inscrito con el nombre de “Marela Life” en Celestún.
Las gacetas que se revisaron incluyen todas las publicadas en 2020 y lo que va de 2023. Se revisó específicamente en las que contienen publicaciones relacionadas con manifestaciones de impacto ambiental, sus modificaciones y resolutivos, tanto a nivel federal como estatal.
Dado que no se encuentra algún trámite de MIA requerido legalmente para un desarrollo de este tipo, podría tratarse de un proyecto “fantasma” que opera al margen de la normatividad ambiental, a pesar de que hay quejas y denuncias de los pobladores de Celestún, que funcionan a manera de “guardias civiles”, vigilando que ningún empresario meta maquinaria pesada para seguir “destrozando” la naturaleza o causando un verdadero ecocidio, tal como revelamos.
Las imágenes hablan por sí mismas. Según los vecinos se trata de ocho hectáreas de duna costera y botoncillo.
Dañar mangle o botoncillo y duna costera en Celestún, que es un área protegida, puede resultar en sanciones severas. Según la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa), si se afecta estos ecosistemas por actividades y trabajos de Cambio de Uso de Suelo en Terrenos Forestales, se puede clausurar totalmente la actividad en el predio.
Además, conforme a lo previsto en el artículo 418 del Código Penal Federal, dichas conductas pueden derivar en un delito penal y se podrá imponer una pena de seis meses a nueve años de prisión, así como una multa equivalente de 100 a 3 mil días multa, a quien o quienes desmonten o destruyan la vegetación natural y cambien el uso del suelo forestal.
En cuanto al papel de las dunas costeras, estas reducen el riesgo de catástrofes derivadas de las inclemencias oceánicas, pues sirven de obstáculo y disminuyen la velocidad del viento, además, contribuyen a prevenir la erosión por tormentas y huracanes.
“Marela Life” se vende… A pesar de no constar con alguna autorización de MIA para cambio de uso de suelo del proyecto. Según la página https://www.desarrollosacd.com/master-plan-marela-life/ se trata de una privada residencial en la playa de lotes semiurbanizados desde 176 metros cuadrados y desde 6 mil 140 pesos el precio por metro cuadrado en financiamiento hasta por 60 meses.
Estos terrenos residenciales contarán con casa club a una esquina del mar. Según la publicidad, se trata de 7.1 hectáreas, con 239 lotes en su primera etapa. Venden el concepto de una reconexión con la naturaleza, entre la diversidad del entorno del desarrollo, sus características únicas, el mar y la tranquilidad.
ACD Desarrollos vende “Marela Life” como lotes residenciales 100 por ciento urbanizados, a 45 minutos de Mérida, a cinco minutos del centro de Celestún, a una esquina de la playa, con excelente geometría y orientación, entrada distintiva, vías de acceso rápidos y amplias, casa club, malecón ecológico interno, calles blancas, y lotes de 8 x 22, urbanizados con energía eléctrica y desde 6 mil 140 el metro cuadrado.
Sus oficinas están en la calle 5 No. 286 con 38 en la avenida Campestre y 40 del fraccionamiento Campestre, en Mérida.
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JG
