Sede de la Comisaría Municipal de Cuauhtémoc, Izamal, se cae a pedazos

La sede de la comisaría municipal de Cuauhtémoc se encuentra en deplorables condiciones, con desprendimiento del techo del amplio corredor, donde raíces de árboles han invadido los muros, además de que el sitio ya se encuentra semi abandonado.

No es descabellado pensar que a este paso pronto se tenga que lamentar la pérdida de dicho edificio que data de mediados del siglo pasado, ya que se encuentra bastante deteriorado, por lo que es necesario que los encargados de hacer restauraciones o las autoridades locales lo reparen para que sea rescatado.

La casa del auxiliar del comisariado se ubica a escasos kilómetros de la cabecera municipal por el lado Sur, lo que la convierte en un punto de cruce entre los visitantes que llegan a la ciudad por esa desembocadura.

Los habitantes compartieron que esta situación de la comisaría lleva varios años de constantes desperfectos a causa de lluvias registradas y ante la nula intervención de las autoridades para su reparación y conservación.

Adrián Manuel Xool, joven de 19 años, oriundo de la comunidad, comentó: “Está muy feo el techo, de la sede, se ha comenzado a caer el revoco, ojalá y los encargados hagan algo para recuperar el techo, si no dentro de poco tiempo continuará cayéndose poco a poco, hasta llegar al punto de desplomarse, porque hay muchas grietas y los fierros que los sostienen ya son visibles, porque se han desprendido pedazos del mismo”.

La comisaría municipal de Cuauhtémoc depende de la jurisdicción de la localidad. Por lo tanto, su máxima autoridad local radica directamente en el comisario local y ejidal, este último es el que ordena y coordina a los ejidatarios en la pequeña comunidad, con ello podrían realizar lo necesario para rescatar el inmueble que es sede de los poderes locales.

Lo que es preocupante para los pobladores es que el techo del amplio corredor del inmueble se nota muy deplorable con grietas y desprendimiento del revoco, asimismo, las columnas fijadas que lo sostienen se ven con cuarteadoras desgastas y humedad reflejada en los extremos y las esquinas.

Uno de los vecinos cercanos, Antonio May, destacó: “El sitio lo pintan cada año, pero ya necesita un revoco general o que algún conocedor haga un estudio de la realidad del lugar, para ver si aún es rescatable, sería muy lamentable que se perdiera, porque es una herencia que habla a la vez del trabajo coordinado de años de los abuelos, los que en su momento fueron los ejidatarios y pudieron construir este edificio que al día de hoy es la sede de la comisaría de esta comunidad”.

Según las cifras del último Censo, la sede contiene una población de alrededor de 800 habitantes, además se ubica a unos cinco kilómetros de la cabecera municipal.

Una placa fijada en la pared interior señala que dicho edificio fue inaugurado el 26 de abril de 1958, por el entonces gobernador del Estado, Agustín Franco Aguilar, y el consejero municipal de vigilancia de la sociedad ejidal, Luciano Pool.

No obstante, el piso del edificio está formado de ladrillos que contienen el año de 1957, lo que hace que esta construcción tenga más de seis décadas, de los cuales no parecer haber sufrido algún cambio importante en su fisonomía, excepto el mantenimiento adecuado para estar en las condiciones en la que se encuentra actualmente.

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NM