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Ejidatarios de Manuel Ávila Camacho cerraron la carretera Chetumal-Mérida, conocida como vía corta, en exigencia del pago de una indemnización por los terrenos expropiados para la construcción de esta carretera hace más de 50 años, un caso similar al que ocurre en la localidad de Graciano Sánchez.
Los ejidatarios colocaron llantas y maderas en el entronque para evitar el paso, además de que se negaron a proporcionar más información sobre el cierre carretero.
Además pidieron la presencia del coordinador de Delegaciones Federales, Arturo Abreu Marín y aseguraron que no dialogarán con ningún otro funcionario federal, ni representantes de la Secretaría de Gobierno Estatal, pues desde hace más de dos años han solicitado la indemnización y sólo han recibido promesas.
Por este bloqueo se formaron esta mañana, largas filas de automovilistas en ambos sentidos de la carretera quienes pidieron a las autoridades atender estos reclamos sociales que mantienen desde hace más de una semana, “secuestrada” la carretera y provoca retrasos.
Cómo se recordará apenas el jueves de la semana pasada fue desactivado el bloqueo de la comunidad Graciano Sánchez, con la promesa a los ejidatarios de ese núcleo agrario, de una reunión este miércoles en donde se les planteará una solución a sus exigencias.
Víctor Martínez Bolaños, titular del Instituto de Administración y Avalúo de Bienes Nacionales (Indaabin), declaró durante el fin de semana pasado en la visita del Presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, ya no había ningún ejido inconforme por indemnizaciones.
El bloqueo continúa y aún no ha llegado al sitio alguna autoridad para negociar con los inconformes.
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NR
