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Los pescadores no podrán salir a pescar mero, debido al cierre del puerto, pues a causa de los vientos del Sureste complica navegar en Lázaro Cárdenas

Este viernes es el último día de veda del mero, una especie de escama que tiene alta demanda, sobre todo en estas vacaciones de Semana Santa, cuando llegan visitantes nacionales y extranjeros al municipio; sin embargo, la captura será incierta en el inicio de temporada, puesto que los fuertes vientos del Sureste impiden la actividad pesquera debido al cierre del puerto a la navegación menor.

La afectación aún no culmina para los hombres de mar, aunque por ahora se acaba la veda del mero, las condiciones climáticas continúan causando estragos a este sector, que no cuenta con el apoyo de las autoridades estatales ni municipales, para que los ayude a llevar la crítica situación que cada año se presenta con las temporadas de prohibición de captura de especies marinas.

Jesús Valerio Aparicio, Presidente de la Cooperativa “Chiquilá”, sostuvo que este viernes es el último día de la veda, que duró dos meses, de modo que se tenía previsto que la actividad pudiera mejorar, ahora que se han calmado los frentes fríos y los descensos de la temperatura.

Sin embargo, externó que la captura del mero este año no tendrá un buen inicio, ya que actualmente están afectando los vientos del Sureste, con rachas de más de 35 kilómetros por hora, lo que ocasiona el cierre del puerto a la navegación menor por lo que los hombres de mar no pueden trabajar.

El mero es una especie de escama que tiene una alta demanda en Semana Santa; sin embargo, la captura es incierta a causa de esta afectación climática, que alarga la crítica situación de más de mil 500 pescadores del puerto de Chiquilá y de la isla Holbox.

Los hombres de mar informaron que aún se mantiene la veda de pulpo, que comenzó en el mes de diciembre; luego llegó la veda del mero, que culminó ayer y actualmente se tiene también la veda de la langosta, que comenzó a principios de marzo y se extenderá por cuatro largos meses.

A esto se le suma la afectación por los frentes fríos y Nortes que se registraron de diciembre a febrero, y desde el mes pasado los vientos del Sureste han sido otro de los factores que afectan a la actividad pesquera, por las rachas de viento que ocasionan el cierre del puerto a la navegación menor de manera constante, sin que los hombres de mar puedan hacer nada.

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NR