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Vecinos de la colonia Ampliación Esperanza una vez más se quedaron esperando a los agentes preventivos quienes nunca llegaron a la calle Naranja, al reportar una batalla campal entre una familia, donde hombres y mujeres se dieron por igual.
En las primeras horas del domingo, un grupo de al menos 10 personas entre hombres y mujeres, comenzaron a agredirse unos a otros sobre la calle Naranja, entre Pitaya y Limón, del referido sector.
Aunque se desconoce el motivo de la batalla campal, se supo que primero iniciaron en el interior de un domicilio, donde los habitantes comenzaron a escuchar los gritos y las agresiones verbales, por lo que algunos intentaron retirarse de la casa donde ingirieron bebidas alcohólicas.
Ya en la calle un hombre aprovechó a otro dejándolo tendido en el pavimento tras varios golpes, donde continúo con la golpiza, mientras que unas mujeres de igual manera se liaban a golpes.
Una de las rijosas logró salirse del escenario para tratar de defender a quien estaban golpeando en el piso, por lo que empujó con un derechazo al contrincante que superaba a su rival, logrando separarlos, mientras esta mujer cayó noqueada en el pavimento luego de que alguien le propinó un “descontón” y quedó semiinconsciente.
Luego del fuerte golpe a la mujer, los involucrados de la inusual pelea callejera intentaron levantarla, pero poco pudieron hacer, la sentaron al no lograr ponerse de pie enseguida.
Ante la tremenda gresca, los vecinos solicitaron el auxilio policiaco que no arribaron, por lo que los involucrados hasta que se cansaron de golpearse unos a otros terminaron con la pelea, unos se retiraron del lugar mientras que otros continuaron la “fiesta”.
GH
