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Construida a finales del siglo XVII, el templo católico que originalmente fue dedicado a San Lorenzo y ahora a San Francisco de Asís, patrono de los telchacqueños se ha convertido con el paso del tiempo en uno de los atractivos turísticos más importantes de esta comunidad ubicada en el Litoral Norte, pues el imponente edificio y su verde atrio, la ha hecho única e inigualable al resto de las iglesias de los alrededores.
Aunque no se sabe la fecha exacta de su construcción durante la época colonial en el Estado, se cree que el lugar se terminó de levantar en el año de 1693. La obra arquitectónica está situada enfrente del parque principal, abarcando casi una manzana, teniendo a espaldas el Mercado Municipal. Pintada de color amarillo crema, la parte del frente la hace destacar.
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La parroquia resalta por su imponente atrio verde, en donde los mismos lugareños optaron por plantar grandes arboladas para generar sombra en ese espacio, los costados del pasillo principal lo adornan enormes palmeras y arbustos hasta ingresar en el edificio. Sin embargo, en los alrededores del atrio, se encuentran colocadas tres campanas, una enorme cruz de madera y otras dos sobre un cerro.
En la parte superior central del edificio, está colocado en cristales transparentes la imagen del patrono. Mientras que en los lados dos campanas sirven para llamar a los devotos a las diferentes actividades que se programan.
La techumbre tiene forma de arco y el interior tiene una tonalidad blanca con decoración de piedra con la que fue elaborada.
En la parte derecha de la entrada, se puede encontrar la pila de bautizo, mientras que en la izquierda está la puerta que lleva a unas escaleras que se dirigen a la cima del lugar, una de ellas en la parte del balcón.
En cada costado del edificio se pueden encontrar diversas imágenes religiosas, como la Virgen de Guadalupe, el Niño Divino, la Virgen María, entre otros, además de la réplica del patrono.
La parte del altar, es de color rojo, con detalles dorados y verdes, similar a la de la parroquia de Santa Ana de la localidad vecina de Dzemul, dándole un toque resaltante y vivo.
En la parte baja, está colocada la imagen original de San Francisco de Asís, la cual únicamente es bajada de su nicho cuando inician las fiestas patronales el 25 de septiembre, permaneciendo colocado en un altar por su antigüedad.
El 4 de octubre, es cuando se celebra a lo grande el día de la efigie, que logra reunir a miles de asistentes que llegan de distintas partes de la Entidad e incluso de Estados, vecinos y países como Estados Unidos, como muestra de fe y promesa.
Una de las historias del patrono que los habitantes narraron de acuerdo a sus antepasados, es que San Francisco fue encontrado en el puerto de Telchac junto a otras imágenes luego de que un enorme barco lo arrojara, lo cual fue motivo de pleito durante cientos de años atrás, entre telchaqueños y dzemuleños, al final el santo se quedó en el municipio tras ser rescatado por la mayoría de sus habitantes.
Por el amplio jardín y sus árboles, los paseantes que van rumbo al puerto se han detenido a ingresar y mirar el emblemático espacio para sacarse fotografías, incluso, los mismos lugareños lo han utilizado como escenario para sesiones fotográficas de XV Años y otras actividades.
Octubre, fue el último mes que recibió a miles de visitantes por la realización de los festejos populares, sin embargo, se espera que continúen llegando visitantes a conocer la parroquia, la cual poco a poco se ha ido posicionando como el principal atractivo de la localidad.
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NM
