Kikil, un rincón natural lleno de historia en Tizimín, Yucatán

Su paso obligatorio a sitios como Río Lagartos, San Felipe y las Coloradas puede aprovecharse para atraer a turistas hacia la comunidad
lunes, 29 de noviembre de 2021 · 14:19

Kikil se postula como una más de las comunidades turísticas de la Ciudad de Reyes, esto debido a su paso obligatorio hacia los puertos de Río Lagartos, San Felipe y Las Coloradas, lo cual hace de esta comisaría un sitio ideal para el turismo, sostuvieron autoridades del poblado.

Con el recién cambio de comisario municipal, la autoridad encabezada por el licenciado Feliciano Montalvo precisó que buscará seguir impulsando esta comunidad como uno de los sitios donde se atienda al turismo, ya que es paso obligado para los que visitan los puertos ubicados en la zona del Litoral Oriente.

Esta pequeña comunidad, ubicada a tan sólo 5.4 kilómetros, al Sur de la cabecera municipal, se ha puesto a prueba el potenciar sus recursos turísticos como son: el parador turístico donde se ofrece comida regional a los paseantes, además del contacto directo con la naturaleza y el cenote que hay en esta localidad.

Asimismo, en las instalaciones del parador turístico podrás encontrar palapas para descanso con hamacas, cabañas para hospedarte, baños, amplios jardines y señal de WiFi y telefonía celular.

“La población cuenta con varios puestos que ofrecen alimentos preparados para los que van a sus ranchos, como para los turistas”.

 Kikil es un paso estratégico, argumentó el comisario, y por tal razón dentro de su plan de trabajo se encuentra el seguir impulsando a la comunidad como uno de los sitios de visita tanto por el turismo nacional como el extranjero.

De igual forma, la comisaría de Kikil tiene una importante historia en lo religioso, ya que cuenta con una iglesia franciscana y su exconvento, con un alto valor histórico que bien es parte del patrimonio de dicha población y que es punta de lanza para seguir promoviendo las bellezas naturales existentes en la zona.

El funcionario municipal indicó que vale la pena hacer una parada para visitar y hacer fotografías en este ex convento en ruinas. La vegetación es hermosa y es posible ver una que otra águila adueñada del lugar.

En su trienio, se comprometió a trabajar en bien de su comunidad por eso procurará cada domingo llevar a cabo actividades que promuevan a esta población, pero, sobre todo, eventos que fomenten los lazos afectivos entre los habitantes, sobretodo entre padres e hijos para que, de esa manera, puedan lograr que la comunidad de Kikil siga saliendo adelante y sea un lugar próspero.

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CC