Mérida, ciudad ruidosa que causa problemas de salud, asegura experto

El Centro Histórico, Aeropuerto y Periférico, son zonas que superan los rangos permitidos de sonido, de acuerdo con el Primer Mapa de Ruido Urbano
domingo, 31 de enero de 2021 · 08:37

De acuerdo con el Primer Mapa de Ruido Urbano de Mérida, realizado por el arquitecto José Arturo Campos Rodríguez, la capital del Estado, es en general, una ciudad ruidosa que en promedio genera entre 65 y 68 decibeles; valores que están por encima de lo recomendado (60 a 64 decibeles) para el cuerpo humano. Hay zonas como el Centro Histórico, el aeropuerto, Periférico y otras vialidades que están en el rango de “molesto” e “inaceptable”,

Con recursos propios, el especialista en acústica arquitectónica realizó este estudio durante poco más de 2 años, llevando a cabo un monitoreo de los niveles de ruido en aproximadamente 3 mil puntos en Mérida. Si bien la zona más ruidosa es todo el primer cuadro de la ciudad, existen otros puntos que pueden alcanzar un nivel de ruido que es perjudicial para la salud.

“Para la gente es algo común saber que hay ruido, pero una cosa es que todos lo sepamos y otra, es justificar que existe y dónde ocurre. Bajo este punto de vista se hizo el mapeo, para determinar los puntos más conflictivos”, dijo.

En su medición estableció un rango de colores que van desde la categoría de “aceptable” para cuando hay entre 50 y 54 decibeles; dos indicadores que están en lo “tolerable” entre 55 a 59, y 60 a 64 decibeles. En el rango de “molesto” se encuentran los valores de 65 a 69 decibeles. En “inaceptable” están los rangos de 70 a 74 y de 75 decibeles.

“De inicio abarcamos el primer cuadro, el Centro Histórico que es un sitio ruidoso; pero también hay otras zonas como el Periférico, y las avenidas García Lavín, Jacinto Canek, Circuito Colonias, Paseo Montejo; a partir de ellas va permeando al interior de las colonias, donde se hace menos severo el ruido”, expuso.  Explicó que “ruido” se define como todo sonido molesto, pero la gente se acostumbra al mismo de manera inconsciente; al final es un tema que afecta a la salud.

“No nos damos cuenta, pero nos afecta, la Organización Mundial de la Salud (OMS) dice que el ruido le quita años de vida a las personas, porque sin que nos demos cuenta nos produce un estrés, y esto puede hacer que tengas un ataque al corazón, por ejemplo. En general, con el ruido, el organismo va deteriorando a las personas”, comentó.

Detalló que, lo que se establece como el ‘“límite permitido”, está arriba de los 60 decibeles, pero no quiere decir que esto sea lo correcto. Lo óptimo sería algo comprendido entre los 35 y 40 decibeles, para tener una vida más tranquila.

Sin embargo, precisó que hay puntos en Mérida que exceden por mucho estos valores, particularmente en el centro. Puso como ejemplo la esquina de la calle 60 con la 59 o el cruce de la 60 con 57, donde el promedio es de unos 80 decibeles; pero si pasa un camión puede llegar hasta los 90, cuando lo óptimo para el ser humano debería ser de entre 40 y 45 decibeles, pero en estos casos se llega a duplicar la cantidad y hasta un poco más.

El arquitecto José Arturo Campos Rodríguez, comentó que, de manera particular en el centro de Mérida se dan diferentes situaciones acústicas que hacen que sea mucho mayor la sensación de ruido.

“Podemos ver que hay diferentes tipos de situaciones acústicas; hay mucho de personas que caminan, coches, camiones, motos, ambulantaje, bocinas de los negocios, gente que va platicando y la sensación sonora es mayor porque las calles son estrechas y las personas están muy cerca. En esta zona la sensación auditiva del sonido es peor. Tal vez el nivel de decibeles puede ser igual que en otros puntos, pero se siente más fuerte porque estás enclaustrado”, comentó.

Dijo que hay sitios, como los alrededores de los mercados San Benito y Lucas de Gálvez, y de la Catedral de San Ildefonso; donde el ruido es mayor por la cantidad de gente. Pero en todas las calles se da, ya sea en la 50, 52, o 62, que tienen desahogo al primer cuadro.

En el norte, comentó, el problema del ruido está relacionado con el tráfico pues la gente no camina mucho; hay camiones, motos, y todo se agrava en la ‘hora pico’. En las noches los principales emisores son los antros y restaurantes.

“En otros sitios hay otro tipo de vehículos: tricitaxis y motos, el que vende paletas. Pero básicamente sí es complicado, porque tenemos el ruido en todas partes y cuando supera lo permisible es cuando tenemos un problema que puede ser de salud”, dijo.

Otras zonas muy ruidosas, apuntó, son donde converge Circuito Colonias con Paseo Montejo. También la zona de Circuito Colonias en la colindancia donde está el Hospital Juárez del IMSS, o Circuito Colonias con la Avenida Canek. Periférico, dijo, alcanza también los niveles mal altos de ruido por la cantidad de vehículos y camiones pesados que transitan y este ruido afecta desde luego a las viviendas que están a la vera del camino.

Agregó que la avenida Aviación y aledañas al aeropuerto son también severamente impactadas por el ruido, sobre todo en el momento de despegue de las aeronaves, cuando sobrevuelan y en el aterrizaje. Dijo que, aunque puede existir un reglamento, las acciones de éste deben de ir acompañadas de procesos de educación cívica. “Se pueden hacer muchas reglas, pero si el ciudadano no está educado, no sirve de mucho y hay que atacar esta conciencia cívica que en otros países sí existe”.

El arquitecto comentó que con este mapa busca contribuir con un granito de arena para futuras acciones que tengan que ver con resolver la problemática.

“Todos sabemos que hay ruido, pero hay que ver cómo está en la ciudad, cómo se comporta y que se generen acciones, ordenanzas para regular la situación”.

OMS advierte de nocividad

En tono con lo anterior, la Organización Mundial de la Salud, comenta que, para el tráfico rodado, recomienda reducir el nivel acústico medio por debajo de los 53 decibeles y durante la noche se recomienda mantenerlo por debajo de los 45 decibeles.

En cuanto al tráfico aéreo, la recomendación es que el nivel acústico medio esté por debajo de los 45 decibeles y por debajo de los 40 en horario nocturno. 

La OMS exhorta a que la media anual resultante de todas las fuentes de ruido relativas al ocio no supere los 70 decibeles.

Señala que los niveles de ruido que se encuentran por encima de los recomendados están asociados a efectos nocivos para la salud.

SY