Pescador de Progreso narra su dolorosa recuperación del COVID-19

“En realidad soy un sexagenario como muchos patrones de costa y según tengo conocimiento hay como una decena de patrones, además de pescadores, infectados de COVID-19, algunos se han arriesgado a salir a pescar pero han tenido que retornar en otras embarcaciones cuando comienzan a ahogarse por exceso de tos y se les cierran los pulmones”, confesó.

“En verdad los pescadores, en el caso de los jóvenes y menores a los 60 años nos consideramos hombres fuertes, nos pasamos más de 12 horas en el Sol intenso, nuestras pieles están adaptadas a fuertes temperaturas, algunos somos buzos y tenemos muy buenos pulmones, pero para el COVID-19 estas situaciones no importan. Lo primero que tienes que tener es un médico de cabecera que esté pendiente de tu padecimiento, que te dé los medicamentos necesarios y contar cuando menos con un tanque de oxígeno medicinal, cuyo precio está arriba de los 5 mil pesos y las cargas a unos mil 800 pesos en estas fechas donde este gas medicinal se ha disparado de acuerdo a la oferta y la demanda”, agregó el hombre de mar.

 “Desde luego ir a un hospital privado es algo que no podría haber cubierto, porque sí tenía un colchoncito guardado (ahorro) pero después de más de 3 meses sin trabajar se acabó, pero estoy seguro que recuperaré mi salud y después pagaré al empresario que me apoyó y que me dijo que no mencione su nombre, y seguiré mi vida de pescador”