Invasores regresan a El Roble Alborada en Mérida; reconstruyen viviendas

Los invasores de El Roble Alborada se resisten a dejar la invasión, por lo que reconstruyeron sus hogares.
domingo, 22 de noviembre de 2020 · 17:05

Los paracaidistas que ocuparon un predio en la calle 16 entre 75-A y 75 de la colonia El Roble Alborada, siguen en posesión del terreno y ahora reconstruyen sus viviendas.

Las endebles construcciones que fueron derribadas con un trascabo la madrugada del primer día de este mes ahora son levantadas con bloques de concreto y se establecieron algunos comercios para no tener que alejarse para que no sean sorprendidos y desalojados de nueva cuenta.

El lugar fue ocupado desde hace dos años por 25 familias que dividieron el terreno en lotes de 10 metros de frente por 30 de fondo. Durante los primeros minutos del primero de noviembre trataron de ser desalojados a la fuerza por un grupo de 40 sujetos, quienes con ayuda de un trascabo destruyeron 18 viviendas.

Quedaron en pie 7, algunas con daños de consideración, los colonos opusieron resistencia hasta que llegó la policía y la situación poco a poco se calmó.

Entre todos establecieron guardias durante las 24 horas y se organizaron para la reconstrucción de las viviendas, los que tenían conocimientos de albañilería ya no tenían que salir a buscar trabajo, entre ellos mismos se contrataron para la reconstrucción.

La misma situación ocurrió con los carpinteros, pues la mayoría de las viviendas estaban edificadas con maderas de tarimas y abundó el trabajo; actualmente se ven construcciones con bloques de concreto, las que antes eran albarradas ahora son bardas.

Algunas mujeres emprendedoras que tenían pequeños puestos ambulantes, como la señora Verónica Ávila Prudencio, madre de tres hijos, tiene un puesto en el que vende audífonos, casetes y diversos artículos de tecnología.

Manifestó que decidió establecerse en el terreno para no alejarse y ser sorprendidas nuevamente, otros establecieron un puesto de pollos asados y una niña de alrededor de 8 años ofrece el producto con micrófono y una pequeña bocina, una madre soltera tiene en su vivienda una tienda y pollería, otra vende empanadas, sopes y salbutes.

Los que estaban en ese momento manifestaron que entre todos colaboran para hacer guardia y pagarle a un abogado que los asesora y realiza los trámites necesarios para la legalización del terreno.

Añadieron que no aceptan intrusos u oportunistas que tratan de hacerse de un terreno y que hasta la fecha ninguna de las 25 familias que inicialmente ocuparon el terreno ha abandonado la lucha.

Por Fernando Poo Hurtado