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Escrito por Carlos Sánchez Fabro
Usuarios de la clínica particular “Carranza” de esta ciudad acusaron a la enfermera Lucely Sánchez de vender medicamentos controlados para el tratamiento del cáncer, sin la correspondiente receta médica.
Esta situación ha generado preocupación y malestar entre los usuarios de la clínica, ubicada en la avenida Venustiano Carranza, casi esquina con Andrés Quintana Roo, en la colonia Las Casitas, pues la venta de fármacos controlados sin la debida prescripción médica constituye una violación grave de las regulaciones sanitarias y éticas que rigen la práctica médica.
Los denunciantes aludieron que la enfermera se les acercó les dijo que les daría medicinas para mitigar el dolor, como “Nalbufina” y “Midazolan”, para un familiar quien padece cáncer en fase terminal. Ninguno de estos medicamentos es fácil de conseguir, y como ella les dijo que se los podía vender sin receta médica, les generó desconfianza, por lo que procedieron a denunciarla.
Además son medicinas que sobran de otros pacientes que perdieron la vida o fueron trasladados a otros nosocomios.
Los afectados expresaron su preocupación por la posibilidad de recibir tratamientos inadecuados o falsificados, poniendo en riesgo su salud y bienestar.
Además, la presunta implicación de una profesional de la salud en actividades ilegales generó indignación en la comunidad, sobre todo porque es un caso que seguramente desconocen los encargados de la clínica “Carranza”.
Al respecto, autoridades sanitarias y de procuración de justicia ya fueron notificadas de las presuntas irregularidades, y se espera que se lleve a cabo una investigación exhaustiva para esclarecer los hechos y determinar la veracidad de las acusaciones formuladas contra Lucely Sánchez.
La clínica “Carranza” no ha emitido hasta el momento un comunicado oficial sobre el tema, pero se espera que el personal coopere plenamente con las autoridades para esclarecer los hechos y tomar las medidas necesarias para garantizar la seguridad y confianza de sus pacientes.
La comunidad de Chetumal está atenta al desarrollo de esta situación, y se espera que las autoridades tomen acciones oportunas para salvaguardar la integridad de los pacientes y preservar la ética en la prestación de servicios de salud en la ciudad.
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HS
