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Escrito por Lusio Kauil
La conmemoración del Hanal Pixán o de los Fieles Difuntos tendrá que ser muy austera este año, ya que todo lo necesario para arreglar el altar, como las frutas y los panes, así como la preparación de la comida, con el pollo y las verduras, ha aumentado considerablemente de precio, según indicaron los residentes de esta cabecera municipal.
En esta ocasión, se observó un incremento en el costo de productos locales como mandarinas, naranjas, dulce de calabaza, velas, jícamas y los panes. La residente Juanita Pech Uc, mencionó que no montará un altar este año como solía hacerlo en años anteriores; en su lugar, preparará comida sólo para el 2 de noviembre, debido a los altos costos.
El precio del pollo, por ejemplo, ha aumentado de 43 pesos el kilo el año pasado a 65 pesos en las pollerías del Centro de la ciudad. Otros productos como el pan, el chocolate, las velas, el incienso, los candelabros y las flores han experimentado un notable incremento de precio en comparación con el año anterior.
Un paquete de chocolate que costaba 50 pesos el año pasado ahora se vende a 70, y un ramo de flores que solía adquirir a 25 pesos ahora se cotiza entre 40 y 60 pesos. Juanita ha optado por una comida sencilla para el 2 de noviembre y sólo invitará a sus dos hijas y algunas vecinas debido a la situación económica.
Por su parte, Lázaro Benítez comentó que las personas que tienen la tradición de celebrar a sus seres queridos fallecidos lo seguirán haciendo, pero de manera más sencilla debido a los precios elevados. Mencionó que ahora se gasta alrededor de 500 pesos en el mercado y no se obtiene mucho debido a los altos costos. El azúcar, por ejemplo, que costaba 20 pesos el año pasado, ahora se vende a 30 pesos, siendo un ingrediente básico para preparar dulces y bebidas para los Fieles Difuntos.
En un recorrido por las panaderías de la ciudad, se pudo observar que el Pan de Muertos tiene un precio de 30 pesos para la versión pequeña, 40 pesos para la mediana y 50 pesos para la grande. El año pasado, según el testimonio de las trabajadoras de estos negocios, se vendían 5 pesos menos en cada una de las presentaciones.
En las tiendas de la ciudad se confirmó que el paquete de chocolate que costaba 50 pesos el año pasado ahora se cotiza a 72 pesos. Las velas de colores tienen un costo de 8 pesos por pieza, mientras que las veladoras más económicas se venden a 20 pesos.
En los lugares donde se venden trastes de barro para el incienso, los más decorados tienen un precio de 100 pesos, mientras que los de barro simple y pequeños se venden a 60 pesos, y los candelabros se venden a 25 pesos.
En las florerías aún no han recibido los productos para los altares, como el cempasúchil, que se importa del Centro del país, las nubes y las margaritas de Chiapas, y la xpujuc de Yucatán.
El administrador de un negocio mencionó que el cempasúchil podría ser costoso este año debido a la aparente falta de producción causada por la sequía que afectó a los campesinos en la zona central del país.
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HS
