Agosto sangriento en Quintana Roo: Nueve mujeres fueron asesinadas; Lucely, una de ellas

El cuerpo de Lucely apareció cubierto con piedras en Puerto Aventuras; como ella, 8 mujeres más fueron privadas de la vida en Quintana Roo en agosto
miércoles, 1 de septiembre de 2021 · 07:36

Lucely Jacqueline Uc Chulin tenía 26 años cuando dejó su familia en Campeche, en busca de la promesa de una mejor vida en Quintana Roo, a donde vino a pedir trabajo en un centro de hospedaje de la Riviera Maya.

A partir del 25 de agosto sus padres no supieron más de ella. Dos días después reportaron su desaparición ante la Fiscalía General del Estado (FGE), en Tulum y tres días más tarde, un transeúnte vio un brazo que salía de entre las piedras de un terreno baldío cerca del fraccionamiento Puerto Maya.

Ayer martes, el Fiscal Óscar Montes de Oca confirmó que el cadáver corresponde a Lucely, cuyo nombre ya forma parte de la estadística de feminicidios en Quintana Roo.

Según un recuento elaborado por este medio, con base en reportes policiacos y periodísticos, suman al menos nueve asesinatos de mujeres en Quintana Roo, sólo en agosto; en ocho de estos casos se evidencian signos de violencia y tortura, por lo que son probables feminicidios.

El primero ocurrió el 5 de agosto, en la Región 230 de Cancún, cuando una mujer fue localizada sin vida dentro de un domicilio. Los vecinos alertaron a las autoridades porque de la vivienda se despedían olores fétidos que evidenciaban el estado de putrefacción en que se encontraba el cuerpo.

Los vecinos informaron que constantemente escuchaban las peleas entre la víctima y su pareja; a ella, la encontraron tendida sobre la cama; de él, se desconoce su paradero.

Paola tenía 31 años, cuando el pasado 14 de agosto murió de un choque hipovolémico debido la sangre que perdió producto de un desgarre vaginal. Su asesinato es el segundo feminicidio registrado en la historia de Cozumel; el primero, en 2018.

El cuerpo de Paola fue hallado en la habitación de un hotel, donde pernoctó con un hombre colombiano identificado como Carlos G., de 59 años, quien fue detenido tras el crimen.

Con cuatro disparos en el pecho y en las piernas, otra mujer fue asesinada el pasado 21 de agosto, luego de que cuatro sujetos balearon el inmueble en el que estaba, en la Región 234, de la colonia Rancho Viejo, del municipio de Benito Juárez. Si bien, los reportes preliminares apuntan que pudo ser víctima colateral de la delincuencia organizada, no se descarta que la línea de investigación sea el feminicidio.

Un día después, aproximadamente a las 2:30 de la tarde, entre las calles Mercurio y Osiris, del asentamiento 2 de Octubre en Tulum, fue encontrado el cuerpo desnudo de una mujer, de identidad desconocida. Presentaba signos de violencia y, debido a su condición, las hormigas se posaban sobre el cadáver.

Horas más tarde, en el mismo municipio, fue hallada otra mujer sin vida, enterrada con maleza y piedras, cerca de un restaurante de la zona costera. Elementos de seguridad vieron que de entre la hierba se asomaban unos dedos. Al acercarse constataron que se trataba un cuerpo putrefacto.

El pasado sábado, también en Tulum, en la zona de invasión conocida como Carlos Joaquín, fue encontrado el cuerpo de una mujer de 50 años de edad, quien presuntamente pereció a manos de su expareja sentimental. Los policías la encontraron sentada en una silla, tapada con una sábana amarilla y, al descubrirla, constataron que estaba bañada en sangre y había dos casquillos percutidos en el piso.

Al siguiente día, en la Supermanzana 75 de Cancún, a dos cuadras de la Ruta 4, una maleta roja fue hallada tirada sobre la vía pública; en su interior se encontraba el cuerpo de una mujer. En versiones preliminares se informó que la víctima fue descuartizada pero posteriormente trascendió que el cadáver estaba completo. Sin haber señales del asesino ni de la identidad de la víctima, solo se sabe que ella era de tez morena, complexión media y cabello rizado.

El pasado lunes, en Puerto Aventuras, delegación perteneciente a Solidaridad, fue encontrado el cuerpo de Lucely. Pasaron cinco días entre su desaparición y su asesinato, del que el principal sospechoso es Fredy M., quien ayer fue detenido.

En el sueño de conseguir un empleo, la joven campechana salió de casa; vestía pantalón de mezclilla, una blusa de manga corta en color blanco y tenis negros; después, fue localizada entre rocas pero su cuerpo ya no tenía vida.

El mes de agosto culminó con el asesinato de una menor de 17 años de edad, en la Región 234 de Cancún, quien recibió al menos cinco balazos a manos de otro hombre, quien se dio a la fuga luego de detonar el arma. Aunque se presume que el móvil del homicidio fue un ajuste de cuentas, esta fue la novena ejecución contra mujeres en la entidad, tan solo en el mes de agosto.

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CG