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El menor de 13 años de edad que fue baleado el miércoles pasado, en el fraccionamiento Villas Otoch Paraíso en Cancún, fue torturado antes de ser ejecutado y ser tirarlo sobre la banqueta, de acuerdo con versiones de los vecinos.
En recorrido hecho por Por Esto!, habitantes de dicha zona habitacional comentaron que el menor había ido a comprar “chamoy” a una tienda en el área, cuando fue subido por varios hombres a una camioneta, de la cual no dieron descripción. Presuntamente, le fracturaron un brazo, lo golpearon y luego lo dejaron tirado sobre la banqueta, para posteriormente dispararle en dos ocasiones.
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Según información preliminar, el menor presentó un impacto de bala en la región auricular derecha y el otro, en la región auricular izquierda. Además, presentaba lesiones en las muñecas -al haber presuntamente estar amarrado- tenía excoriaciones en el antebrazo izquierdo y fractura en brazo izquierdo. El arma utilizada era pistola calibre nueve milímetros.
En su declaración, el padre del menor, estudiante de secundaria, dijo que éste no salía de su casa, no fumaba ni consumía drogas y tampoco tenía problemas con nadie.
Vecinos comentaron que en el fraccionamiento Villas Otoch Paraíso, hay puntos de venta de drogas, por lo que pidieron mayor presencia policial, al ser un lugar inseguro y violento.
Cabe mencionar que esta zona está catalogada como uno de los focos rojos en inseguridad en Cancún y donde mayor número de reportes se hacen a los números de emergencia.
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CG
