Así quedó la casa de Don José, el abuelito al que le dieron croquetas en Chetumal

Don José, es un abuelito de Chetumal cuyo caso se hizo viral luego de que recibió un plato de croquetas con arroz cuando pidió comida en una casa. 

La historia conmovió a los internautas y un grupo de personas se organizó para recaudar fondos, despensas e incluso construirle una pequeña casa para que ya no viviera en la calle. Ahora, en redes sociales mostraron cómo quedo la casa de Don José.

En las fotografías se puede ver una pequeña casa de madera pintada en color azul y con techo de lámina, el cual será el nuevo hogar del abuelito, quien posa más tranquilo junto a su cama.

"Este fue el resultado de la obra que pone Dios en el corazón de las personas dispuestas, Él jamás se olvida de sus hijos. La gente así debería de triplicar", escribió en Twitter un usuario identificado como José Tovar, quien compartió las fotografías.

La historia de Don José

El caso de Don José se dio a conocer el 22 de julio pasado con una publicación de Facebook en la que se mostraba el plato que recibió el abuelito, el cual tenía una mezcla de arroz con croquetas.

"Darle un plato con croquetas y arroz a un señor mayor de edad. Para mi es sinónimo de burla y de gente sin educación", compartió Elian Cruz junto a las fotografías.

Después, otro joven identificado como Fabián González salió a las calles de Chetumal para encontrar a Don José y lo invitó a comer, pasearon juntos en moto e incluso lo llevo a su casa para que pueda darse un baño. Al compartir las fotografías, la historia llamó la atención y distintas personas comenzaron a preguntar cómo podían ayudar a Don José.

Fue así que decenas de personas se mostraron solidarias con el abuelito y realizaron donaciones en efectivo y de despensa para apoyarlo, incluso ciudadanos de Monterrey, Ciudad de México y California se unieron a la causa. Con fotografías y recibos de compra, el grupo de jóvenes que se hizo cargo del caso fue comprobando la entrega de ayuda para Don José.

Ahora, el abuelito vive más tranquilo en su propia casa y no tiene que salir a las calles para pedir comida. El grupo de personas que lo ayudó desde el inicio se comprometió en redes sociales a seguir pendiente de Don José para que no vuelva a ser humillado ni pase necesidades.

Por Redacción Digital Por Esto!

GM