Comerciantes de Chetumal indican que el 2020 fue un mal año para ellos

La baja afluencia de compradores en este 2020 a causa del COVID-19, provocó problemas para los comerciantes chetumaleños.
miércoles, 30 de diciembre de 2020 · 16:30

El 2020 ha sido un mal año para los comerciantes de la avenida Héroes, en el centro de Chetumal, pues las ventas en línea vía Facebook han perjudicado sus ingresos económicos, además de la pandemia provocada por el Coronavirus.

La baja afluencia de compradores por la principal avenida comercial de la ciudad se debe a diversos factores que se han intensificado en los últimos años, uno de los cuales son las ventas en línea a través de la red social “Facebook”, misma que se acrecentó debido a la pandemia de  COVID-19, pues la gente permanecía en cuarentena y las tiendas cerradas.

Así lo confesó María Chable, quien cuenta con una tienda de ropa sobre la avenida Héroes, quien reconoció que si han tenido ventas pero estas han sido bajas en comparación a los años anteriores, sabiendo que las ventas en línea son el principal comercio de ropa en la actualidad.

“En estas fechas hemos tenido poquita venta, no como esperábamos, pero si algo, no tanto como hace años pero también es porque la gente no tiene dinero, no hay ahorita, es parejo. Hay mucha venta en Facebook, en línea, si nos afecta”, comentó.

Por otro lado, la economía local aún logra recuperarse de las afectaciones que dejó la pandemia de Coronavirus, pues las ventas cayeron completamente, y es algo que ya no se va a recuperar nunca pues fueron más de 6 meses sin ingresos en su local.

“Esta duro todavía, ahí vamos luchando pero ni modos, hay que seguirle, no queda de otra. El 23 hubo poca venta, el 24 estuvimos aquí hasta las 8 de la noche pero no había venta, otras veces hemos cerrado hasta las 11 de la noche pero este año no fue así”, destacó.

Otra situación que afecta a los locales del lugar es la inseguridad que se vive en la ciudad, pues los robos a farmacias y tiendas de auto servicio provocan desconfianza, lo que los obliga a cerrar sus locales más temprano de lo habitual, con el fin de evitar robos.

“A veces pasa la patrulla pero se va rápido, entonces no queremos arriesgarnos a que nos asalten y nos quiten lo poco que vendamos, mejor cerramos temprano a las 8 de la noche aunque no hayamos vendido mucho”, finalizó la entrevistada.

CG