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El reporte de restos humanos frente al batallón situado sobre la avenida José López Portillo, movilizó a las autoridades; sin embargo, en el sitio sólo localizaron un lienzo de tela con un mensaje en el que amenazan con seguir asesinando custodios del penal del municipio de Benito Juárez.
Los hechos ocurrieron a la una de la mañana, cuando de manera anónima fueron reportados a la central de emergencia 911 que había restos humanos en un área verde frente a las instalaciones que albergan al 64 Batallón de Infantería, en Cancún.
Rápidamente, el personal de la Policía Municipal acudió al lugar de los hechos para buscar en la zona, por lo que realizaron un minucioso recorrido en dicho sector hasta que localizaron una tela de color negro que contenía un texto escrito con tinta negra.
En el escrito daban un ultimátum al director del penal para que realice los cambios de varias personas privadas de la libertad que son nombradas y quienes presuntamente delinquen desde el interior del centro penitenciario.
El texto finaliza diciendo que sólo tienen 24 horas para trasladarlos o continuarán asesinando a elementos de la Policía Procesal, tal y como ha ocurrido en los últimos meses, al lugar de los hechos arribaron agentes preventivos, quienes encargaron de retirar la manta para ser turnada ante el agente del Ministerio Público.
Cabe mencionar que durante la movilización de las autoridades el personal militar no se presentó para tomar conocimiento de lo ocurrido pese a que la manta fue colocada frente a sus instalaciones.
No es la primera vez que los miembros de la delincuencia organizada dejan este tipo de mensajes en ese mismo lugar, ya que en en mayo pasado tres cabezas humanos fueron abandonadas en ese sector junto a la lona que contenía amenazas contra miembros de la delincuencia organizada.
Respecto a las recientes amenazas contra custodios del centro penitenciario, en noviembre una mujer que pertenecía a dicha policía fue asesinada a uno metros de la cárcel, por lo que algunos celadores han pedido su cambio a otros penales y algunos han renunciado voluntariamente por temor a ser asesinados.
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