Sin avances en la búsqueda de las mujeres desaparecidas en Cozumel
La familia de una de ellas asegura que las autoridades mienten al decir que está en Tabasco; la Fiscalía de Quintana Roo no ha informado sobre la búsqueda
No hay rastros ni avances en las investigaciones de Leydi Noemí Dzul Domínguez, menor desaparecida en Cozumel desde el pasado 3 de noviembre del 2020 y de la menor Stephanny Michel Pons Hernández, vista por última vez el pasado 25 de marzo de este año.
Las autoridades siguen informando que las investigaciones y la búsqueda de Leydi Noemí continúan, pero no hay avances y mientras tanto, aseguran que la menor de 13 años se encuentra en el estado de Tabasco y están a la espera de la colaboración de la policía de ese estado “para realizar las diligencias”.
La familia de la pequeña asegura que la autoridad miente, ya que la menor aún no ha sido localizada.
De acuerdo a Ivette Zapata, coordinadora de la Fiscalía General del Estado de Quintana Roo (FGE), en la isla, los dos casos están en proceso, uno en investigación, el de Leydi Noemí, del que hasta el momento no hay avances pero se continúan llevando a cabo las pesquisas del caso, y el otro en espera de que las autoridades policiales del estado antes citado realice todas la diligencias de rigor para poder contactar y traer de vuelta a la menor.
Sin embargo, la familia de Stephanny, la niña de 13 años, asegura que no hay indicios que de que la adolescente se encuentre en ese estado, ya que de acuerdo a la última información que les proporcionó la Policía de Investigación, la niña fue sacada de la isla, estuvo en Playa del Carmen, Tulum y Mérida, y de ahí se perdió toda prueba o indicio que logre su ubicación y presumen que pueda estar en Tabasco.
El abuelo de la menor, el señor José Luis Hernández, dijo que los familiares de la niña han recorrido los lugares donde presuntamente podría estar, sin que hasta el momento tengan respuesta positiva, y exigió a las autoridades hablar con la verdad, “que no informen a medias, que no nos mientan, ni ellos saben dónde está mi nieta y no han hecho nada más que mirar las cámaras”.
El afligido abuelo comentó que han pasado casi dos meses y de Stephanny no se sabe nada y temen que esté expuesta a delitos que pongan en riesgo la vida de la menor desaparecida. Aseguró que a pesar de que insiste en conocer algún avance que los lleve a la menor, no hay información nueva que pueda dar la esperanza de encontrarla.
CG
