En la final del Dubai Duty Free Tennis Championships dos tenistas se jugaron su primer título WTA 1000. La rusa Anna Kalinskaya formulaba la mejor semana de su carrera luego de superar a nada más y nada menos que Iga Swiatek, polaca número uno del mundo.
Desafortunadamente, la moscovita cayó ante Jasmine Paolini, italiana que remontó el partido hasta los tres parciales, llevándose la victoria con un marcador final de 4-6, 7-5 y 7-5.
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Kalinskaya, 40 del ranking, llegaba a la final en la ciudad emiratí como la gran sensación de la semana en este torneo, después de encadenar dos triunfos de prestigio: despachó a Coco Gauff (3) y a la polaca Iga Swiatek (1), reciente campeona en Doha.
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A la rusa le queda el honor de haberse convertido en la segunda jugadora en alcanzar la final de un torneo WTA 1000 (los inmediatamente inferiores a los Grand Slam en la jerarquía del tenis femenino) llegando con una Wild Card (invitación).
Su gran semana en Dubái confirma las buenas sensaciones que transmitió en el Abierto de Australia el pasado enero. Hasta entonces, no había superado la segunda ronda en un Grand Slam y en Melbourne llegó a cuartos de final.
Sin embargo, no se puede demeritar el trabajo hecho por Jasmine Paolini, quien hizo valer su jerarquía en el ranking y conquistó su segundo título WTA, después del logrado en Portoroz (Eslovenia), en septiembre de 2021.
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SP