Empleados de la Escuela Normal de Hecelchakán laboran enfermos de COVID-19, denuncian
Tres empleados de mantenimiento y dos administrativos acuden a la Escuela Normal a trabajar, presuntamente por obligación de las autoridades del lugar, exponiéndolos a los demás trabajadores
Personal administrativo y de apoyo que labora en la Escuela Normal Rural “Justo Sierra Méndez” de Hecelchakán, Campeche, quienes por temor a represalias optaron por el anonimato, acusaron que hay hermetismo en cuanto a la existencia de cinco casos positivos de COVID-19 entre trabajadores: tres de mantenimiento y dos administrativos, los cuales presuntamente son obligados por las autoridades del lugar a trabajar sin importarles el riesgo de que contagien al resto de compañeros.
En forma posterior, este dato se corroboró con algunos empleados del sitio, quienes ratificaron que hay trabajadores que presentan síntomas de COVID-19 pero acuden a laborar y ponen en riesgo a los demás empleados.
Dieron a conocer esta situación para que se tomen medidas estrictas y así prevenir un posible contagio masivo, ya que a las autoridades escolares “lo único que les interesa es cuidar las instalaciones, pues por el momento a la institución no asisten docentes ni alumnos, a excepción del Consejo Estudiantil que al igual acude sólo a guardias; sin embargo, temen infectarse y luego propagar esta enfermedad”.
Las personas consultadas señalan que al momento hay cinco casos de COVID-19, empleados que no han dejado de trabajar, ya que por la falta de empleo por motivo de la contingencia sanitaria no pueden faltar.
“No nos podemos dar el lujo de perder nuestros trabajos, pero los responsables deben poner estrictas medidas de salud para que los infectados no afecten a toda la flotilla de personal de apoyo, administrativo y de la sociedad de alumnos”.
Explicaron que los directivos de la Escuela Normal buscan que esta contingencia sanitaria no se dé a conocer por temor ante las posibles sanciones de la Comisión para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Copriscam).
Abundaron que entre las penas incluye el clausurar el acceso a las instalaciones, ya que ante la presencia de casos de coronavirus y al ser un lugar cerrado, hace más vulnerables a los que asisten.
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CC
