Plástico ´envenena´ Laguna de Atasta en Ciudad del Carmen

La Península de Atasta produce cerca de 16 toneladas de plásticos al mes, informó la asociación Marea Azul.
domingo, 10 de enero de 2021 · 10:56

La representante del Movimiento Alterno de Recuperación de Ecosistemas Afectados A.C. (Marea Azul), Lourdes Rodríguez Badillo, dio a conocer que el polietileno es un plástico que ocasiona un severo daño al medio ambiente y especies; sin embargo, existen personas que rellenan predios en las márgenes de lagunas y manglares con ese material, como el que se detectó hace dos días a la entrada de Atasta Pueblo.

Indicó que en las márgenes de los manglares y lagunas no se debe construir, mientras el lugar que rellenaban con resina de polietileno (desechos que cubren refrigeradores y congeladores), probablemente sea un predio invadido.

“La Comisión de Áreas Naturales Protegidas (Conanp), a través de su director José Hernández Nava, escuchó la denuncia, porque cuando vimos ese tipo de daño ambiental lo comunicamos a todas las autoridades, desde municipales, estatales y federales, de tal modo que procedió a levantar 40 bolsas de polietileno, aproximadamente”, añadió.

Dijo que si se vuelve a detectar el vertimiento de este material lo reportarán de inmediato, y aportarán sus características para que las autoridades apliquen sanciones. Los pobladores también deben denunciar cuando vean a gente que atente contra la naturaleza, porque cada vez que se destruye un árbol, se tira basura en la laguna o se mata una especie silvestre, el daño es para las futuras generaciones.

Extinción masiva

Expresó que la contaminación con plásticos es una de las que lleva a la extinción de las especies, mientras la Península de Atasta produce de 14 a 16 toneladas de plásticos por mes, por el manejo que tienen en sus basureros al aire libre, y a la hora de las inundaciones todos los plásticos flotan y terminan en el humedal.

Explicó que el polietileno no solo afecta el subsuelo, sino que esos desechos se convierten en micropartículas de plástico y terminan en los organismos de los peces, especies que habitan en la Laguna del Poom y Atasta.

De acuerdo con datos del Fondo Mundial para la Naturaleza, por sus siglas en inglés World Wildlife Fund (WWF), casi el 90% de la vida silvestre en el planeta tiene plásticos en el organismo.

“Esto es una situación grave, porque se habla a largo plazo de una extinción masiva, y de continuar con esas acciones, podríamos cambiar la historia de la humanidad, por ello debemos ser menos egoístas e imprudentes al tratar a la tierra, porque lo que le hacemos de forma negativa repercute contra del planeta, así también contra los seres que lo habitamos”, señaló.

Apuntó que la Laguna de Atasta es el sistema estuarino de mayor importancia en el país y es una zona que gracias a que se incluyó al Área Natural Protegida se evitó la entrada masiva de Petróleos Mexicanos (PEMEX), pero aun así ya existía actividad petrolera que llevó a la extinción de la almeja en la Laguna del Poom, actividad que era productiva para las comunidades; no obstante, es triste que los propios habitantes lejos de cuidar sean también el factor de contaminación, pues rellenan terrenos y manglares con el polietileno, el manglar es una vegetación que debe ser reforestada, para no permitir que se conviertan en invasiones para viviendas.

Agregó que la contaminación por plásticos es una de las causas en la disminución de especies, también se incluye la sobreexplotación y falta de vigilancia, pues existen lugares como “Punta de la Disciplina”, donde colocan bolsos para atrapar a cardúmenes enteros que ahí pasan su etapa juvenil antes de salir a mar abierto.

“Le hemos dado seguimiento, ponemos vigilancia, montamos retenes y le caemos a la gente que hace esas prácticas, porque abrieron unos canales donde colocan los bolsos y esto es totalmente inhumano porque todo es captura ilegal de especies larvarias comerciales, especies que sostienen la pesquería en el Golfo de México”, asentó.

Aseguró que Laguna de Términos y Carmen no terminaron como otras ciudades petroleras como Coatzacoalcos, Villahermosa, Comalcalco o Pantanos de Centla, porque aún hay respeto hacia los recursos naturales, como el cuidado de los delfines y tortugas marinas.