Incrementa contaminación de lagunas por envases de plástico en Ciudad del Carmen

El exceso de consumo de productos que vienen en envases, empaques o platos desechables es sinónimo de contaminación de los arroyos, lagunas y mares, tal como se puede observar en “Arroyo Grande” que sirve de atracadero a las embarcaciones ribereñas; basura que afecta a las especies marinas y que llegan como alimentos a la mesa de miles de familias carmelitas, señaló el presidente de la asociación del grupo ecológico “Laguna de Términos, Delfines“, AC, Rosario Velueta Benítez.

Mencionó que los plásticos no sólo contaminan las costas, sino que también afecta a toda la fauna marina; los animales se enredan en ellos y confunden los fragmentos más pequeños con comida, lo que puede provocar su intoxicación y acabar con su vida; y debido a la cadena alimenticia los seres humanos ingieren este material al consumir pescados y mariscos, aunque las consecuencias para su salud aún no están determinadas.

Señaló que la forma más efectiva de atajar este problema es evitar que los plásticos se viertan en el océano, ser conscientes y tener la cultura de reciclaje, ya que los plásticos de un sólo uso, como cubiertos, botellas, bastoncillos de algodón o los filtros de los cigarros, son responsables del 50% de la contaminación marina.

“En Arroyo Grande se puede observar la cantidad de basura que llega a ese lugar, las cuales son arrastrada por las corrientes de agua que se forman en las calles en temporada de lluvia que van a las alcantarillas y su destino final son los arroyos y el mar, desechos plásticos que provienen de diversos puntos, y tardan décadas, incluso hasta siglos en degradarse”, añadió el ambientalista.

Explicó  que las condiciones del mar, como por ejemplo la luz y el oxígeno, hacen que este proceso de degradación sea mucho más lento que en la tierra; mientras tanto, el plástico con la fuerza del agua y la vida marina, se va rompiendo y transformando en microplásticos que afecta el ambiente y a la vida marina, y provoca la muerte mamíferos marinos, aves, y toda la especie de peces y crustáceos, alimentos que llegan a los hogares.

“Estamos en la era de lo desechable y las bebidas embotelladas, la Isla de Carmen, es el principal consumidor del  estado de Campeche y quizás del país, y la gran mayoría de esos envases que se usan en la industria son del material flexible y resistente, casi siempre transparente, al que llaman PET por su nombre en inglés (Polietilen tereftalato)”: aseguró.

Indicó que el consumo de bebidas embotelladas sigue creciendo a pesar de las campañas en contra, y porque no se recicla ni el 20% de lo que se genera, todo lo demás va a la basura: rellenos sanitarios, calles, tiraderos a cielo abierto, playas, terrenos baldíos, ríos, el mar, de todos los residuos sólidos que tiramos 30% es PET, un material que tarda de 100 a mil años en degradarse.

Con información Fernando Kantún