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Llegan al AICM los restos del mexicano Orión Hernández Radoux
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La mañana de ayer, un hombre de oficio albañil resultó con lesiones graves tras quedar atrapado entre los escombros de un predio en construcción que se derrumbó en la calle 76 de la privada Puerta de Piedra de la comisaría Dzityá.
La obra está ubicada a unos metros del Anillo Periférico y la hacienda San Antonio Hool. Aunque se dijo en un principio que el alarife perdió las piernas, las autoridades no lo confirmaron. También se supo que la parte que se desplomó fue del garaje, que cayó por completo y aplastó parte del cuerpo del hombre.
Los compañeros de labores del albañil, al notar que estaba atrapado entre los escombros, pidieron ayuda las autoridades, a través de los números de emergencia. Arribaron bomberos y paramédicos de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP), quienes auxiliaron al hombre y tras estabilizarlo lo trasladaron al Hospital General Agustín O’Horán, según se comentó.
La Policía aseguró el inmueble para iniciar una carpeta de investigación y el deslinde de las responsabilidades. Alrededor de las 11:00 horas llegaron otros trabajadores para iniciar sus labores como lo suelen hacerlo todos los días, pero fueron enterados de la situación y la razón por la cual estaba delimitado el predio y se marcharon.
Un caso similar ocurrió el pasado 16 de junio en un predio ubicado en la privada Aire Puro Residencial, ubicada en la carretera federal Mérida-Progreso, a un costado de la lateral de Tamanché.
De acuerdo con lo que se pudo averiguar, se solicitó apoyo a los servicios de emergencia porque el techo de una construcción se cayó sobre unos trabajadores. Según se supo, los alarifes estaban colando esa parte cuando se les vino encima por motivos que se desconocen.
Trascendió que los hombres estaban en la parte de arriba cuando la construcción cedió, cayeron y quedaron sepultados entre los escombros, por lo que fue necesaria la intervención de los bomberos de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP), quienes los rescataron.
Anteriormente, el 27 de abril, un alarife cayó desde lo alto de una iglesia, al Poniente de Mérida. Se dijo que el hombre trabajaba en el techo de la Casa del Anciano Bajo la mirada del Señor de la capilla de San Isidro Labrador, en la calle 51 con 46 de la colonia Miguel Hidalgo.
El trabajador se precipió desde unos ocho metros y no portaba ningún tipo de protección, tuvo que ser llevado grave a un hospital.