Por la falta de aviones, Aeroméxico sigue cancelando sus vuelos hacia la Ciudad de México, suspensiones que iniciaron el martes de la semana pasada y hasta ayer sumaban 17, lo que genera malestar y resignación entre sus clientes, algunos varados desde hace tres días sin encontrar acomodo en los pocos que están en operación.
Ayer no fue la excepción, se cancelaron dos vuelos de llegada por la mañana (820 y 832) y dos más por la tarde (825 y el 835).
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También se suspendió el vuelo a Houston de United, que debió llegar el lunes por la tarde, pernoctar en la terminal de Mérida y retornar a su punto de partida a las 8:05 horas.
Entre las 00:15 y las 7:10 horas aterrizaron el 7281 de Viva Aerobus procedente de la Ciudad de México; a las 00:15 horas, con 30 minutos de anticipación, el 4448 y el 1014 de Volaris de Tijuana y la CDMX; a las 4:58, 29 minutos antes y a las 7:08 de México, con 22 minutos de anticipación.
Otros nueve aterrizaron entre las 8:10 y las 13:45 horas, seis de los cuales provenían de la capital del país y los otros de Monterrey, el 3062 de Guadalajara y uno de Toronto, ambos con atraso de poco más de hora y media.
Por la tarde se programaron 16 llegadas: ocho de la metrópoli y los demás de Miami, Silao, Tuxtla Gutiérrez, Oaxaca, Houston, Puebla, Guadalajara, Dallas y Monterrey.
En relación con los vuelos de salida, por la mañana despegaron seis aeronaves, tres de ellas con atraso por la neblina, fueron el 2940 a Dallas, a las 07:50, con una hora 50 minutos; el 4281 a Monterrey, a las 07:45, con una hora 35 minutos, y el 449 a Tijuana, a las 7:30, con una hora 12 minutos, los únicos que despegaron a tiempo fueron el 821 a la Ciudad de México, el 3061 a Guadalajara y el 823 también a la capital del país.
Entre las 8:10 y las 13:35 horas alzaron el vuelo otros nueve vuelos, siete a la Ciudad de México, uno a Oaxaca y otro a Tuxtla.
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NM