Así se vivió la conmemoración del 113 Aniversario de la Revolución Mexicana en Yucatán
Cientos de alumnos de diferentes instituciones educativas del estado de Yucatán marcharon para conmemorar el 113 Aniversario de la Revolución Mexicana
Cientos de alumnos de Educación Inicial y Preescolar del interior del Estado marcharon por las principales calles de sus poblaciones, ataviados como revolucionarios, adelitas, campesinos, bomberos y policías, en un derrotero dedicado a la conmemoración del 113 Aniversario de la Revolución Mexicana, en el que se notó el apoyo de los padres de familia, no solo en la confección de sus atuendos, sino también en la decoración de las carriolas y carritos que utilizaron en su recorrido.
En el puerto, estudiantes de la Primaria Candelaria Ruz Patrón presentaron una serie de números artísticos. Maestros y alumnos se caracterizaron como personajes que formaron parte de este hecho histórico del país.
El programa comenzó con la ceremonia cívica de los Honores al Lábaro Patrio, bailables con elegantes adelitas y revolucionarios, así como con una exhibición de tablas rítmicas en la que participaron alrededor de 400 niños, quienes el próximo lunes 20 saldrán a desfilar por las calles principales del municipio.
De igual manera, en las comisarías no faltaron los eventos conmemorativos, por lo que en varias comunidades integrantes de los planteles educativos salieron a realizar recorridos bajo el cuidado y vigilancia de la Dirección de Seguridad Pública y Tránsito Municipal (DSPT).
En Chicxulub Puerto se desarrolló un alegre y multicolor desfile en el que participaron aproximadamente 200 pequeños. En la plaza principal de la Comisaría del Cráter se hicieron los Honores a la Bandera y los presentes entonaron el Himno Nacional, mientras que la alumna Frida Interián relató las hazañas históricas del país y reseñó la Revolución Social Mexicana, ocurrida en 1910.
Posteriormente, el contingente paseó por diversas vías donde los niños participaron junto con sus maestros, además de que ejecutaron sus rutinas gimnásticas y bailes.
Los que se llevaron la atención y aplausos fueron los más pequeños, quienes representaron a vendedores ambulantes, como los que ofrecen papitas, algodones de azúcar, tamales, etc. Tampoco faltaron los carritos y carriolas que empujaban sus orgullosos padres.
Simultáneamente, las comisarías de Chelem, Chuburná, Flamboyanes y Paraíso realizaron sus respectivos derroteros con la asistencia de revolucionarios y adelitas.
En Tizimín participaron 2 mil 119 alumnos y maestros de 14 preescolares y 15 primarias durante casi dos horas en una marcha muy colorida, ambientada por las acrobacias y danzas que ejecutaron los estudiantes durante su trayecto.
El contingente partió de la Plaza de Toros y recorrió las calles principales hasta arribar al Parque Juárez. La Banda de Guerra de la Policía Municipal encabezó al colectivo, seguida por los asistentes ataviados con sus trajes de revolucionarios y adelitas, mientras que otros portaron sus uniformes deportivos. Todos lucieron con gallardía dando muestra de sus valores cívicos y su amor por la Patria.
No faltaron los redobles de las bandas de guerra, y también se lucieron con sus magistrales interpretaciones las agrupaciones de musicales del Instituto México y del Colegio Tizimín. Cuando llegaron al punto de reunión, los participantes presentaron sus pirámides y rutinas deportivas.
Un hermoso caballo con sus crines trenzado con los colores patrios y portando la Bandera de México, así como dos enormes personajes que representaban a Francisco I. Madero y Emiliano Zapata, que fueron parte del contingente de la Escuela Abelardo Conde Ruz, hicieron más vistoso el evento, así como la música mexicana y de diversos ritmos latinos que ambientaron las intervenciones de los educandos.
Se reconoció la destacada participación de los niños del Centro de Atención Múltiple Víctor Cervera Pacheco, quienes pusieron de manifiesto que sus capacidades especiales no fueron impedimento para disfrutar esta fiesta cívica.
En Valladolid, con marcialidad y gallardía, se realizó el desfile en la cabecera y en la comisaría de Dzitnup. En la Sultana del Oriente, el evento inició a las 8:00 horas en los alrededores del Parque Francisco Cantón Rosado, encabezado por el contingente de la Dirección de Seguridad Pública Municipal.
El paseo duró poco más de una hora, lapso en el que 19 agrupaciones que conformaron la columna que avanzó a pie hasta llegar a la Iglesia de San Servacio.
De manera paralela se llevó a cabo este evento conmemorativo en el poblado de Dzitnup, donde los niños de varias escuelas demostraron su marcialidad. Se contó con la participación de la Telesecundaria Adolfo Cisneros Cámara, el Telebachillerato Comunitario Intercultural Bilingüe, así como el Centro de Educación Inicial y Prescolar Indígena Margarita Masa de Juárez.
En Acanceh, cientos de infantes de los jardines de niños marcharon por la localidad en compañía de carruajes diseñados por ellos mismos y vistiendo como revolucionarios y adelitas.
Desde las primeras horas de la mañana, en la cancha del municipio se reunieron alumnos del Centro de Educación Preescolar Indígena Ix Chebel Yax, Centro de Educación Preescolar Sastal y Jardín de Niños Josefina Ramos del Río, donde se desarrollaron los Honores a la Bandera y se recordaron los sucesos revolucionarios a través de un discurso.
El desfile de los preescolares partió de la calle 26, recorrió la 21, pasó junto al parque principal y culminó en el Palacio Municipal.
En la localidad costera de Sinanché, al ritmo de la Banda de Guerra y melodías mexicanas, más de 300 colegiales de seis instituciones educativas abarrotaron la calle principal, lo que provocó que cientos de personas salieran de sus casas para apreciar el derrotero que dejó atónitos a los espectadores por las caracterizaciones de los participantes.
El recorrido partió a las 7:00 horas del Campo Deportivo Felipe Carrillo Puerto. El Kínder Manuel Cepeda Peraza encabezó al contingente que terminó su paseo en las instalaciones del Centro Comunitario para el Desarrollo (CCD), donde cientos de personas se reunieron.
Cada escuela tomó la decisión de caracterizar a sus educandos, de manera que resaltaron las adelitas, escaramuzas, vaqueros, soldados, enfermeros, bomberos, agentes policiacos, y más, mientras que otros niños portaron su uniforme deportivo.
Por más de 40 minutos, los pequeños marcaron el paso deteniéndose en cada esquina para que el público pudiera observarlos y fotografiarlos.
A mitad del recorrido se presentó una lluvia que en cuestión de minutos se detuvo, lo que permitió que la actividad pudiera continuar.
En el municipio sureño de Peto, las autoridades llevaron a cabo un acto cívico en los terrenos de la exestación de ferrocarriles antes de que partiera el contingente a las 8:30 horas, integrado por alumnos de escuelas de Educación Inicial y Preescolar. Los pequeñines asistieron vestidos como revolucionarios, adelitas, damas modernas, futbolistas, policías, bomberos, entre otras profesiones; mientras los padres de familia decoraron sus carritos, triciclos y carriolas como carretas, ferrocarriles e incluso cañones, lo que hizo más vistosa la dinámica.
El Centro de Educación Inicial Pequeños Saltarines encabezó el desfile y el Preescolar Indígena Raquel Dzib fue el último en pasar.
En Seyé, infantes de educación inicial y preescolares portaron trajes coloridos y creativos de adelitas y campesinos revolucionarios. El recorrido fue corto, pues solo abarcó el primer cuadro de la ciudad.
El acto conmemorativo comenzó con los Honores a la Bandera y la entonación del Himno Nacional Mexicano. Para que los niños, maestros y padres de familia pudieran participar en el derrotero con seguridad, oficiales de la Policía implementaron un operativo vial y de cierre de calles durante la marcha, que concluyó poco después de las 9:20 horas.
Mientras tanto, en Hunucmá, vestidos a la usanza de 1910, alumnos de seis jardines de niños desfilaron por el centro, donde los peques, usando sombreros, cananas, botas de charros y vestidos largos de adelitas, bailaron con alegría las melodías de la época de la Revolución, con lo que se ganaron los aplausos del público.
En el parque central, los jefes del hogar instalaron sus puestos de venta de antojitos yucatecos y golosinas, por lo que al término del derrotero, el sitio se convirtió en un lugar de fiesta y diversión para los asistentes.
Pese a que en Suma de Hidalgo no hubo desfile, en la localidad se escuchó a los estudiantes haciendo sus prácticas de la Banda de Guerra y la Escolta, a manera de ensayo para su próxima marcha.
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NM
