Corredor industrial de Umán, el imán de inversionistas en Yucatán

Ante la poca disponibilidad de espacios en Mérida para seguir creciendo, los empresarios e industriales buscan sitios en la zona metropolitana que garanticen su inversión, que tenga certeza jurídica y evite conflictos por tenencia de tierra con el sector social y la orientación que se va preparando es hacia corredor industrial de Umán, que tiene un futuro prometedor.

De acuerdo con el director Ejecutivo de Desarrollo Industrial, Emergente Peninsular, Esaú Garza de Vega, el municipio de Umán está trabajando en su Plan de Desarrollo Urbano para ofrecer a la demanda certeza y una clara definición de la vocación de los espacios para el desarrollo industrial, comercial y vivienda.

Además, en el ámbito nacional la demanda por espacio industrial creció 42% en el primer trimestre de este año, lo que significó un requerimiento de 1.8 millones de metros cuadrados y en este lapso se construyeron en el país 82 naves industriales, lo que significa que Yucatán debe ponerse a la altura de las necesidades del país.

En este caso, el corredor industrial de Umán debe marcar la pauta porque la demanda actual es tener espacios hechos a la medida, mejor conocido como Buil to Suit (BTS) y además en esa zona las autoridades federales están planeando construir el nuevo aeropuerto y cerca de ahí también pasará el Tren Maya.

Se requieren, por tanto, espacios de última generación, sitios congruentes con las necesidades industriales internacionales y sustentables, porque la industria internacional está buscando sitios estratégicos para acercarse al mercado americano y latinoamericano.

El corredor industrial de Umán, que se ubica a un costado de la carretera Mérida-Campeche, tiene las tierras aptas para desarrollar parques como el que requiere la industria internacional, como lo necesitan las empresas porque tienen una buena ubicación logística al estar cerca del Anillo Periférico de la ciudad y una conexión cerca al Puerto de Altura de Progreso.

Los otros parques industriales, si bien han funcionado correctamente, poco a poco se van saturando, el caso de Kanasín o el que está por la carretera a Cancún o las áreas que aún tiene Progreso a los costados de la carretera. A diferencia de estos sitios, Umán va avanzando en la preparación de su PDU, que estaría listo en este año.

El analista explicó que la necesidad actual es tener parques industriales con espacios a la medida, con bodegas a la medida y modulares, listos para que una empresa internacional pueda asentarse sin ningún problema de logística, y sobre todo con certeza jurídica.

Hemos visto, dijo, el crecimiento de la zona industrial de Kanasín, donde está Woodgenix, dedicada a la producción de gabinetes de cocina para exportación a Estados Unidos y donde recientemente construyó otro espacio para la producción de triplay; también ha crecido el parque ubicado sobre la carretera a Cancún donde está Walmart Centroamérica.

Esto habla de que Mérida se está acabando los espacios y se tiene que recurrir a parques industriales bien planeados, como el que se está desarrollando en Umán, que funcionen como un ecosistema bien organizado, y donde el municipio pueda saber con certeza dónde ubicar las áreas para vivienda, los sitios comerciales y la industria.

Garza de Vega dijo que hay que pensar en nuevas opciones porque la Población Económicamente Activa (PEA) cada vez va creciendo más, los sectores de servicio y turismo no pueden seguir creciendo y a eso se suma la migración cada vez más alta de personas vienen a Yucatán buscando disfrutar de paz y tranquilidad.

Entonces, los proyectos estratégicos industriales deben ir de la mano con la educación, que a la vez repercute en mejores sueldos. Ahí tenemos el caso de la industria Fincantieri, que pronto se establecerá en Progreso y necesitará mano de obra especializada.

Allá el Gobierno del Estado trabajó para traer, junto con Fincantieri, a sus proveedores internacionales y eso significa que requerirán de más espacios para asentarse, de ahí la importancia de nuevos parques industriales a la medida.

Por ejemplo, añadió, Woodgenix ya no puede traer insumos de Rusia por la guerra, pero ya abrió una planta en Mérida para producir triplay; sin embargo, faltan insumos y aquí en Yucatán representa una oportunidad para la industria de la madera, pues hay terrenos y espacios para cultivar. Por ahora, la empresa de capital chino tiene que comprar insumos a Brasil, pero puede ponerse de acuerdo con los industriales locales para producir clavos, manijas y otros insumos para alimentar a esa empresa exportadora y así generar ingresos para los yucatecos.

Japón, por ejemplo, tiene en mira a Yucatán, pero aquí el problema es la falta de parques industriales modulares.

Al opinar sobre la falta de tierra, expuso que el ejido tiene mucha y en la mayoría de los casos está desaprovechada. En ese sentido, dijo que hay que darle vocación y utilizarla para el crecimiento económico y desarrollo del Estado.

La geopolítica está cambiando o se está reforzando, como el caso de la relación China-Estados Unidos, y para China, México representa la mejor opción para acercase al mercado comercial de Estados Unidos, a través de cadenas de proveedores y partes, como el caso de los “chips”, producción que cayó en crisis a raíz de la pandemia. De acuerdo con el Reporte Inmobiliario Industrial Solili 1T 2020, Monterrey se volvió a colocar por segundo año consecutivo como el mayor demandante de espacios industriales del país.

Síguenos en Google News y recibe la mejor información

CC