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El vuelo 1110 de VivaAerobús procedente de la Ciudad de México llegó a las 03:53 horas, en vez de las 02:45 horas, debido a que el avión en el que pretendían viajar sufrió una avería y hubo que esperar la llegada de otra aeronave, según manifestaron varios pasajeros.
De acuerdo con datos recabados, la mayor parte de los pasajeros llegaron desde las 22:00 horas al aeropuerto de la capital del país para registrase, obtener su pase para ingresar a la sala de última espera, donde estuvieron esperando para abordar el avión de regreso a Mérida.
Alrededor de las 01:00 horas inició el abordaje de la aeronave, pero no habían abordado ni 20 personas, cuando se informó que el “equipo” la aeronave iba a ser sometida a inspección y se pidió a las personas que descendieran de la misma.
Después de una hora, les pidieron cambiarse a otra sala donde se encontraba el aeroplano que iban a utilizar para la ruta del 1110, porque el otro definitivamente llevaría más tiempo en estar listo para operar y poco antes de las 02:00, les pidieron abordar la nave que despegó a las 02:25 horas.
“Fue un viaje muy cansado, manifestó uno de los pasajeros, porque la mayor parte tuvo que salir del hotel antes de las 21 horas, para llegar a tiempo a la terminal aérea, debido al exceso de tráfico que había por todas partes debido a los miles de peregrinos que se dirigían hacia la Basílica de Guadalupe para asistir a la serenata dedicada a la Virgen Morena del Tepeyac, luego de dos años de haberse suspendido debido a la Pandemia del COVID-19”, dijo María Jesús N.
Otras manifestaron que no les gustó que los mantuvieran horas esperando, sin que nadie explique el motivo de la demora, pero cuando un pasajero llega tarde, no sólo pierde el vuelo, sino que se ve obligada a comprar otro boleto para poder viajar, o sea, que es pérdida total, pero y cuando la empresa es responsable del atraso, jamás compensan en algo a sus clientes a quienes no les ofrecen por lo menos un vaso de agua ni les devuelven su dinero para que puedan tratar de conseguir viajar por otra línea aérea, violando de manera impune el derecho de los consumidores, sin que las autoridades responsables como la PROFECO intervengan y traten de poner freno a los abusos que comenten las compañías aéreas.
Por otra parte, el vuelo 448 de Volaris, que conecta a la ciudad de Tijuana, con Mérida y Oaxaca también sufrió un atraso de 17 minutos.
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NR