Hoteleros del Centro Histórico de Mérida insisten en la reubicación de paraderos

Hoteleros del Centro Histórico de Mérida insisten en la reubicación de los paraderos de autobuses, manifiestan que provocan aglomeraciones y ahuyentan a los turistas.
martes, 25 de agosto de 2020 · 08:23

Hoteleros ubicados en el Centro Histórico de Mérida insisten en la necesidad de reubicar los paraderos de autobuses, ya que provocan aglomeraciones de personas y ahuyentan a los pocos turistas.

Miguel Ángel Moreira, administrador del hotel Maya Yucatán, dijo que hace poco más de dos meses se sumó a la propuesta de vecinos y comerciantes que viven por el rumbo del Parque de Santa Lucía, concretamente en el cruce de las calles 57 por 58, que demandan el cambio de paraderos de autobuses por la cantidad de problemas que ocasionan, como es el exceso de ruido y la contaminación que daña las fachadas de los predios, basura, aglomeraciones, etc.

También pidió la reactivación del sector turismo en Yucatán, de lo contrario muchas empresas del ramo no podrán resistir la crisis causada por la pandemia del COVID-19 que ya duró casi seis meses y por lo visto durará otros seis o más meses.

David Quintal Medina, concesionario del sistema de transporte, explicó que por ley corresponde al Gobierno del Estado realizar los cambios de paraderos del transporte público de pasajeros, hasta donde le han informado el Ejecutivo del Estado se encuentra realizando los estudios correspondientes, por lo tanto, no hay fecha prevista para dar el siguiente paso.

Recordó que, en el pasado, los ajustes de tiempo se realizaban en el punto donde concluían las diferentes rutas, estrategia que por un tiempo funcionó bastante bien, porque en el Centro sólo se realizaban maniobras de ascenso y descenso.

Puntos de contagios

De acuerdo con datos recabados son alrededor de 247 paraderos de autobuses ubicados en la zona Centro de la ciudad capital, sitios que tanto investigadores como académicos y hasta dirigentes de cámaras empresariales, han señalado son puntos de contagios de COVID-19 entre la población, además de propiciar serios problemas de movilidad.

En teoría, el área que ocupan los autobuses del transporte urbano de pasajeros deben funcionar como sitios de ascenso y descenso, es decir, no deben permanecer más de cinco minutos, máximo.

Sin embargo, los operadores por “costumbre” usan esos lugares como “paraderos”, lo que aunado a la falta de vigilancia de los elementos pertenecientes a la Dirección de Transporte del Estado de Yucatán (DTEY), esa práctica se ha generalizado y lejos de significar una alternativa para elevar la calidad del servicio, por el contrario acarrean serios problemas de vialidad, contaminación, ruido, amontonamiento de personas, sobre todo en las denominadas “hora pico”, destrucción de pavimentos y aceras, suciedad, sólo por mencionar algunos.

Apenas la semana pasada, cuando el Gobernador del Estado se reunió con los presidentes de cámaras empresariales, éstos señalaron que dos de los aspectos que faltan por resolver son precisamente el sistema de transporte, que calificaron de “obsoleto”, y la reapertura gradual del sector turismo.

Si bien el Ejecutivo escuchó y hasta ofreció tomar cartas en el asunto, hasta la fecha no se han adoptado las medidas pertinentes que contribuyan a mejorar el servicio del transporte urbano de pasajeros y, a decir de los investigadores, vamos rumbo al caos.

Demanda ciudadana

Cuatro de esos puntos conflictivos se ubican en la calle 57 entre la 58 y 60, donde funcionan cuatro paraderos, dos sobre la calle 58 entre la 55 y 57, donde paran los camiones de la ruta Las Américas y Francisco de Montejo I y II, y otros dos sobre la 57 entre la 58 y 56, donde paran las combis que cubren la ruta Gran Plaza y Las Américas, y un autobús que cubre la ruta a Ticopó, donde se encuentran por lo menos tres hoteles Maya Yucatán, Flamingo y Toledo, cuyos administradores desde hace varios meses (dos) pidieron sean reubicados, demanda a la que se unieron comerciantes y vecinos de ese rumbo.

“No estamos de acuerdo con estos paraderos porque nos hacen caminar más de seis cuadras para llegar al mercado”, fue el clamor entre los usuarios.

Sin embargo, todo indica que las autoridades del ramo (DTEY) no tienen planes de realizar más cambios, pues el único que se realizó, a decir de la gente, fue reabrir el tráfico vehicular sobre la calle 58 por 55 que hasta hace unas semanas estaba cerrada y sólo se permitía el paso a las unidades del transporte público de pasajeros como camiones, combis, taxis, etc.

Uno de los encargados de los hoteles que funcionan por ese rumbo de la ciudad indicó que, cuando los pocos turistas se dan cuenta de las aglomeraciones que hay en esa zona, se van y buscan otro sitio donde hospedarse y donde no haya tanto amontonamiento y ruido.

Por Víctor Lara Martínez