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Escrito por Víctor Lara Martínez
Como cada año, Mario Avilés Pacheco estuvo trabajando dos semanas en la instalación del decorado navideño en el frente de su domicilio, ubicado en la calle 19 entre 36 y 38 de la colonia San Damián, mejor conocida como La Casa de Jengibre o de las Galletas.
Con la ayuda de sus hermanas y padres, hace 15 años comenzó a diseñar el decorado del frente de la vivienda con motivos navideños, comenzando con elárbol de navidad y luces multicolores.
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Hasta que hace diez o doce años decidió transformar la fachada en una Casa de Galletas y, con el paso de los años, fue incluyendo nuevos elementos, como el decorado de la puerta, los bastones de caramelo, dos soldados como los del cuento de El Cascanueces, paletas, regalos y otros adornos alusivos a la temporada.
Explicó que el decorado está hecho a base de poliestireno, madera, tela, pintura de metal, luces de colores, etc.; piezas que cada año debe restaurar para eliminar los daños que sufren al quedar expuestas a las inclemencias del tiempo y que hoy forma parte de un extenso inventario.
Comentó que, mientras muchos gastan en comprar ropa, calzado, entrenamiento físico o lo que sea, él y sus hermanas han invertido más de 10 mil pesos en materiales que se requieren para transformar el frente de su domicilio.
Avilés Pacheco apuntó que esta idea es del agrado de sus papás, quienes lo han apoyado, por lo que se siente contento y muy agradecido. Además, destacó que muchas personas van a conocer la llamada Casa de las Galletas, por lo que también se siente querido y reconocido por los meridanos.
Aclaró que no es un experto en serigrafía, pero le gusta ser creativo y, con la ayuda de sus hermanas, construyeron cada una de las piezas decorativas con dinero que obtuvo de trabajos extras que logró conseguir este año, no obstante los efectos de la pandemia y aun cuando tiene deudas y apuros económicos.
Avilés Pacheco dijo que el año pasado se registró para participar como candidato a rey del Carnaval de Mérida y quedó en segundo lugar, pero hoy en día ya no quiere saber nada del tema.
Sin embargo, se siente satisfecho de trabajar como artista independiente, por lo que muchos lo conocen como Mario “El Mimo”. Además de desempeñarse en esta profesión, comentó que también es actor, acróbata y bailarín.
“El Mimo”, como le gusta que lo identifiquen, dijo que ayer comenzó a instalar el pesebre para celebrar el nacimiento de Jesús de Nazaret, el cual espera terminar de instalar entre hoy y mañana porque planea montarlo de manera muy diferente, a comparación del año pasado.
Finalmente, recalcó que, si de día la fachada de su casa llama la atención, por la noche se aprecia mucho mejor y es cuando más personas acuden a ese rumbo de la ciudad para conocerla.
JG
