Producción de leche en Tizimín disminuye un 60% debido a las lluvias

La cantidad de leche que se produce no es la misma que se generaba en el municipio antes de que se registraran los fenómenos meteorológicos Gamma y Delta, ya que decreció en un 60 por ciento.

De aproximadamente 1,300 litros de leche al día que se generaban entre los productores de la región, los efectos de estos fenómenos provocaron que se reduzcan entre 500 y 600 litros del lácteo, según comentó Alberto Pérez Coronado.

El representante de los productores lecheros de Tizimín explicó que esto se deriva del cambio de manejo de las vacas, lo que reduce la producción de leche, ya que no se ordeñaba a la hora correcta, se esperaba a que cese la lluvia o porque se quedaban sin energía eléctrica.

Aunado a que tenían que ordeñar a mano o con máquinas portátiles, además que esta actividad que realizaban los productores en un lapso de 2 horas, ahora la ejercen en 5.

Reveló que el litro de leche bronca la comercializan en 8.50 pesos y esta baja en la producción dio pauta a que los productores resientan pérdidas económicas de alrededor de 6 mil pesos al día, por lo que hasta la fecha, entre todos ellos tienen aproximadamente 42 mil pesos de quiebra en su actividad.

Como ejemplo compartió que en su rancho 2 Arbolitos, el pasado lunes se redujo la producción, pues de 850 litros que se extraía diariamente se logró sólo 300, además de que resintió la pérdida de 10 becerros que murieron ahogados por la inundación del rancho.

Puntualizó que esta situación afectó sobre todo a los pequeños productores que generan de 50 a 100 litros de leche, pues de su comercialización depende la obtención de la comida del día y por ende esta reducción los deja con ganancias casi nulas.

Dijo que será difícil levantarse, que depende del factor tiempo, ya que las vacas requieren mínimo de 3 a 6 meses para regularizar su producción por los desajustes registrados en su manejo y que el panorama es similar en todos los sectores que se dedican a la producción lechera.

Añadió que les ayudaría el apoyo en la alimentación mayor de sus animales para contrarrestar las bajas de la producción de leche, ya sea con alimentos concentrados para que se vayan recuperando las vacas con mayor prontitud.

Sin embargo, manifestó que son conscientes de que los tres niveles de gobierno ahora casi no disponen de recursos, ya que con los que cuentan tienen que dirigirlos a situaciones de emergencia y requerimientos de la gente por la afectación que sufrieron con el paso de estos fenómenos meteorológicos.

Externó que no todo fue negativo, pues en su momento las lluvias de la tormenta tropical “Cristóbal” trajeron consigo la producción excedente de pastizales y gracias a ella acabó la sequía que padecían por meses y que tuvieran la dicha de contar hasta la fecha con suficiente alimento para sus vacas.

En cuanto al recuento de daños por el paso de dichos fenómenos mencionó que no se ha podido verificar la cantidad, ni hasta qué magnitud llegan las pérdidas, ya que varios productores aún no pueden llegar a sus ranchos porque los caminos están cerrados por los numerosos árboles que fueron derribados por el viento.

Empero, se sabe que se registraron pérdidas de animales, inundación de sus unidades de producción y daños en los techos de lámina de las instalaciones de los ranchos. Para finalizar exhortó a los productores lecheros a que no se desalienten.

Los animó a que continúen firmes en sus actividades y que le den tiempo al tiempo, pues vendrán tiempos mejores y de ello depende la paciencia, en la espera de que el manejo de los animales se regularice para que a la par se acreciente la producción.

Por Luis Manuel Pech Sánchez