No hay suficientes inspectores para vigilancia pesquera, pues en Quintana Roo sólo hay cinco para todo el litoral del Mar Caribe y Golfo de México, afirmaron integrantes de la cooperativa pesquera en la isla.
Señalaron que la venta de langosta fresca, aun en veda, que se comercializa a través de las redes sociales, afectará a corto plazo el ciclo de reproducción de la especie.
Indicaron que se venden piezas de la talla de 10 centímetros, cuando la ley marca que debe ser de 13.5, por lo que insisten en que la veda debe respetarse, porque cuando es temporada de captura escasean, lo que a la cooperativa le perjudica.
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Explicaron que la etapa de reproducción de langosta tiene un ciclo de vida de cuatro meses, que es el tiempo de veda como lo establece la Conapesca, por lo que romper su equilibrio repercute en su producción, y es lo que hace la gente que las captura antes de tiempo.
Informaron que no hay una representación de la Conapesca en la isla, sólo en Chetumal, por lo que es culpa de las autoridades que únicamente haya cinco inspectores para el Mar Caribe y el Golfo.
Resaltaron que actualmente el precio del kilo de langosta oscila entre los 500 y 550 pesos, y aunque ya se niveló en comparación con el 2020 y 2021, cuando bajó a 300 pesos, de las 42 toneladas que lograron capturar, solo se posicionaron 28 toneladas.
Los pescadores dijeron que tienen langosta en veda congelada y bajo inventario fisco de la Conapesca, agregando la importancia de no comprar productos en veda, sino legalmente capturados en tiempo y forma.
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GC
