Habitantes de la comunidad de Carlos A. Madrazo, decidieron salir y cerrar la carretera con dirección a Escárcega, Campeche, debido al incumplimiento del Gobierno Estatal, sobre los daños que les ha causado por los volquetes que trabajan para el Tren Maya en la zona, pese a que hace unas semanas, les dijeron que sí los atenderían, pero a la fecha nadie sabe nada.
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La situación se ha vuelto insostenible para los habitantes de esta localidad, quienes han experimentado directamente impactos negativos en su entorno, a pesar de las promesas previas que serían atendidos, la falta de respuestas concretas y acciones por parte de las autoridades ha llevado a la comunidad a tomar medidas drásticas para llamar la atención sobre su situación.
Hace algunas semanas, representantes gubernamentales visitaron la comunidad de Carlos A. Madrazo y aseguraron a los habitantes que se ocuparían de los problemas generados por las pesadas unidades que trabajan del Tren Maya en la región; sin embargo, a la fecha acordada para obtener información sobre las soluciones propuestas, los habitantes se encuentran en un estado de incertidumbre total, sin noticias claras ni avances palpables.
Los daños reportados por la comunidad incluyen la degradación del medio ambiente, afectación de tierras cultivables, daños a la infraestructura local y alteraciones en el estilo de vida de los habitantes.
La falta de comunicación y transparencia por parte de las autoridades ha exacerbado la preocupación y la frustración entre los afectados.
Los manifestantes expresaron su descontento con pancartas y consignas, exigiendo que se cumplan las promesas hechas por los gobierno municipal y estatal y que todavía no han cumplido. La carretera cerrada simboliza tanto la conexión física bloqueada como la ruptura de la comunicación entre la comunidad y las autoridades responsables de abordar sus inquietudes.
Los habitantes de Carlos A. Madrazo han dejado claro que seguirán con sus protestas hasta que se garantice una solución satisfactoria y se les proporcione información detallada sobre las acciones que se tomarán para reparar los daños causados en su comunidad.
Esta situación resalta la importancia de la transparencia, el diálogo y la responsabilidad gubernamental en grandes proyectos mientras los habitantes de Carlos A. Madrazo continúan exigiendo respuestas, el cierre de la carretera se mantiene como un recordatorio visible de la urgencia de abordar las consecuencias negativas colaterales, no solo en términos de desarrollo, sino también en la protección y el respeto hacia las comunidades locales afectadas.
Dialogo
Luego del bloqueo carretero arribaron elementos de la Guardia Nacional Carreteras, personal del Ayuntamiento de Othón P. Blanco, y representantes de la Obra del Tren Maya con la finalidad de dialogar con los manifestantes para llegar a un acuerdo.
El personal de la comuna othonense reveló que no es facultad la reparación de varias vías que los manifestantes exigían, aunque se comprometieron a fungir como enlace para poder realizar la vinculación con las instancias requeridas, con la finalidad que pueda proceder la reparación de las vialidades, que resultaron dañadas por el paso de los volquetes.
Después de más de dos horas, en las que las autoridades del Ayuntamiento, el Gobierno del Estado y representantes del Tren Maya, dialogaron con los representantes, lograron obtener la aprobación de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) para iniciar el proceso de reparación de una de las vialidades, pero los manifestantes insistían en permanecer en el lugar hasta en tanto la maquinaria no llegara al sitio para iniciar con los trabajos.
Fue finalmente aproximadamente a las 12:00 horas cuando por fin se logró convencer a los manifestantes que se permitiera el paso de los vehículos, y que en caso que en un plazo prudente no arribara al lugar volverían a cerrar la carretera, aunque esto finalmente no ocurrió.
Al sitio acudió el personal de la Sedena y de una empresa que labora precisamente para las obras del Tren Maya, quienes iniciaron con las reparaciones de las calles, primero con el proceso de “raspado” para emparejar el terreno, en tanto se puede realizar la repavimentación de las calles.
Los habitantes lamentaron que sólo de esta forma, generando un bloqueo carretero, se haya logrado obtener una respuesta por parte de las autoridades, pues cuando realizaron el trámite de enviar solicitudes y gestiones, no lo consiguieron.
La carretera que fue cerrada por espacio de cuatro horas, provocó largas filas en ambos sentidos de la vía federal 186, provocando retrasos en los traslados de personas, mercancías e inclusive en las propias obras del Tren Maya, pues durante ese tiempo ningún vehículo que transportaba material pétreo pudo atravesar la zona.
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AT