Día de las Madres: Niño desconoce que su mamá está encarcelada en Cancún

Los familiares de la reclusa le hacen creer al menor que su mamá está trabajando en otro país; indican que no quieren causarle dolor al niño.
lunes, 10 de mayo de 2021 · 10:40

'¿Dónde está tu mami?, Está trabajando pero no puede venir porque el virus le hace daño a mi abuelita, en mi cumpleaños me mandó ropa y cuando me manda dinero a veces lo guardo porque me quiero comprar un perro, casi no hablo con ella, pero mi tía me trae las cartas que me manda y yo también le escribo, bueno, me ayuda mi tía o mi abuelita, le digo que la quiero mucho y que le vaya bien en su trabajo y ella me dice que me porte bien, que me extraña y que está trabajando mucho para ayudarme a juntar dinero para comprarme un perrito; si la extraño y le hice un dibujo con un corazón para el Día de las Madres, ya se lo mandamos', es lo que respondió Jacobo, un niñode seis años de edad, al cual Por Esto! le realizó una entrevista.

La madre del pequeño se encuentra recluida en uno de los Centros de Reinserción Social (Cereso) de Quintana Roo, purgando una condena de tres años por un delito federal, la tutela del menor la tiene una hermana de ella, y al niño le han hecho creer que su mami trabaja en otro país, ya que lo que menos quieren es que crezca sintiéndose mal, diferente o que sea víctima de burlas por una mala decisión que la mujer que lo trajo a este mundo tomó en su momento; a la fecha las cárceles del Estado mantienen recluidas a 148 mujeres, 99 de ellas aún enfrentan un proceso, en tanto 49 han sido ya sentenciadas por delitos federales y del fuero común.

Para la tía del pequeño, la pandemia fue un pretexto perfecto para inocentemente mentirle al niño, quien comenzaba a preguntar el paradero de su madre, pues el decirle que estaba trabajando lejos ya no funcionaba, pero las restricciones de viajes para evitar la propagación del COVID-19 en todo el mundo sirvieron para que Jacobo se conformara con sólo recibir cartas de su madre, quien desde una celda le escribe y le cuenta que ella está bien, ganando mucho dinero, mismo que comparte con él, cada mes el niño recibe un sobre con un dólar, el piensa que es dinero que le mandan por portarse bien, cuando en realidad es parte de las propinas que su tía recibe por su trabajo como mesera.

Karla como quiso ser llamada, desde hace dos años y tres meses cuida de Jacobo, luego de que su hermana fuera detenida y comenta, “desde que nos llamaron para avisarnos que estaba en la fiscalía pensé en mi sobrino, yo lo amo, es como un hijo para mí, siempre fue muy esperado, a mí me quitaron la matriz desde hace seis años, entonces en mis planes ya no está el ser madre y a él le doy todo, sabes, aparte él no tiene por qué cargar con los errores de mi hermana, pues mi mamá siempre le dijo que se alejara de las malas compañías pero le encanta el desmadre y ahí está pagando las consecuencias, yo por eso casi no la visito”.  

Fue una tarde cuando la madre del pequeño fue detenida, Jacobo estaba por cumplir cuatro años, su tía comenta que las primeras noches lloraba mucho porque quería estar con su mamá, y que los primeros meses fueron los más difíciles para todos, fue un cambio total en sus vidas desde que se inició el proceso penal, pues la abuela del menor se lamentaba por haber criado una hija criminal, la madre del pequeño se estaba deprimiendo al estar encerrada y Karla era el único soporte y quien tenía que tragarse todo, ella sacaba fuerzas pensando en lo mejor para su sobrino y fue por eso que le inventó una historia, donde la mujer que le dio la vida es la mejor y se encuentra muy bien.

“Mi mamá trabaja en un restaurante como mi tía, pero está más lejos de aquí, el día de mi cumpleaños iba a venir pero no la dejaron subir al avión por lo del virus y como mi abuelita a veces se enferma, le dijo que no era bueno, pero cuando ya no haya coronavirus ya va a regresar”.

¿Qué vas a hacer el día que vuelvas a ver a tu mami? No voy a dormir porque va a llegar en avión y quiero ver cuando pase por aquí en el cielo y cuando llegue a la casa vamos a hacerle una fiesta sorpresa y la voy a abrazar, porque dice que de seguro ya crecí y estoy más fuerte”.

Actualmente en los Centros de Reinserción Social (Cereso) de Cancún y Chetumal hay 148 mujeres recluidas.

CG