Día de las Madres: Persisten las muertes maternas en Yucatán

A pesar de que a nivel nacional entre 2002 y 2018 se redujo de forma significativa el número de muertes maternas, Yucatán no ha podido reducirlas por debajo de 10 casos anuales desde hace 19 años.

En 2018, la entidad registró 52 casos de fallecimientos por causas prevenibles relacionadas con el embarazo y el parto por cada 100 mil nacidos vivos, lo que ocasionó que se colocara como el cuarto estado a nivel nacional con mayor tasa de mortalidad materna.

Una investigación que acaba de dar a conocer el Grupo de Información en Reproducción Elegida (GIRE) bajo el título Salud Materna en Yucatán, señala que el estado logró disminuir esta tasa de mortalidad materna a 19.5 casos por cada 100 mil nacidos vivos para finales de diciembre de 2019, pero la cifra volvió a aumentar para diciembre de 2020 a una tasa de 51.

“El número es alto en sí, pero también supera el promedio nacional de 30.2 defunciones maternas en ese mismo año”, alertó la reciente publicación de GIRE, en la que da cuenta que 2018 fue el año más crítico en razón de mortalidad materna, al regresar a tasas registradas en 2001 y 2003.

Aunque este aumento ha sido asociado en todo el país a los casos de defunción vinculado con la pandemia por COVID-19, en 2020 Yucatán se convirtió en uno de los estados que superó la media nacional de 46 casos por cada 100 mil nacidos vivos, convirtiéndose en una de las entidades con mayor razón de mortalidad materna en todo México.

Ante esta alta incidencia, Karen Luna, coordinadora de investigación en GIRE, detalló que el gobierno de Yucatán debe revisar la situación actual, a fin de buscar programas y acciones que garanticen el derecho a la salud, con especial interés en la salud reproductiva, ya que cerca de la mitad de las mujeres siguen siendo Maya hablantes y la atención médica que reciben en hospitales de segundo nivel se complica por la falta de comunicación, porque los médicos no hablan maya.

“No sólo es importante que el gobierno se preocupe por hacer más hospitales, y más clínicas, porque éstos no van a solucionar este problema, es muy necesario garantizar que la atención a la salud que se presta durante el embarazo, parto y posparto sea con un enfoque de interculturalidad”, aseveró la investigadora de GIRE.

Recordó que, en 2010 Chihuahua, Oaxaca, Guerrero, Ciudad de México y Tlaxcala fueron las cinco entidades con la mayor tasa de mortalidad materna en el país, situación que cambió ligeramente en 2015, pues los primeros lugares con esta incidencia fueron Nayarit, Chiapas, Oaxaca, Guerrero y Chihuahua.

Pero en 2018, el aumento de casos en Yucatán hizo que subiera al cuarto lugar a nivel nacional después de Chiapas, Nayarit y Durango, lo cual muestra una repentina subida, pasando de 12 muertes en 2017 a 23 en 2018, lo cual equivale a un incremento de 91 por ciento.

La investigadora de GIRE comentó a PorEsto! que este incremento pudo ser multifactorial, pero más allá de las causas, “este aumento inusitado lo que pone en evidencia es que se deben revisar las intervenciones estatales que ya existen, cómo se están operando las posadas para saber cómo podemos aprovecharlas de mayor manera y que el gobierno revise las políticas públicas que está implementado y si está funcionando, pues darle impulso, y lo que no esté funcionando, tener la información para corregirlo y adecuarlo”.

INEGI

Datos del Inegi señalan que en Yucatán 940 mil 345 mujeres cuentan con derechohabiencia en el IMSS o el ISSSTE, pero hay 237 mil 433 sin esta seguridad social, por lo que terminan recibiendo atención en el INSABI, que no tiene la infraestructura para atender todos los embarazos y partos.

La investigación de la organización GIRE advierte que la realidad en términos de salud que vive Yucatán no puede pasar desapercibida, pues 22 por ciento de su población no cuenta con derechohabiencia a instituciones como el IMSS o ISSSTE.

“Este es un retroceso grave, pues se acerca al 24 por ciento que carecía de estos servicios hace una década”, alerta el estudio Salud Materna en Yucatán, en donde también se hace hincapié en que “la muerte materna representa una violación a múltiples derechos humanos: el derecho a la vida, a la salud, a la igualdad y la no discriminación, a la vida privada, a no ser sometido a tratos crueles e inhumanos, y al goce del progreso científico y tecnológico”.

Proponen mejorar la partería

La investigadora de GIRE propuso que ante el salto que dio Yucatán en la tasa de mortalidad materna, una opción para evitarla es mejorar la partería tradicional en partos que no son de alto riesgo y que podrían efectuarse en las mismas comunidades por parteras capacitadas y vinculadas a una red de comunicación con el sistema de salud para estar preparados en caso de una emergencia.

“La partería tradicional podría en un momento ayudar a despresurizar o desahogar todo lo que se está cargando en el sistema de salud, a fin de atender en las propias comunidades los partos normales y que no son de alto riesgo, porque eso desahoga los hospitales, pero bajo una red de comunicación con los hospitales en caso de una urgencia”, destacó.

Otra opción para disminuir la mortalidad materna son las Posadas y Transporte de Asistencia a la Mujer Embarazada que empezó a implementarse en 2002 en todo el país y busca regionalizar los servicios, de tal manera que mujeres que vivan en comunidades alejadas más de dos horas de un centro de salud, se pueda organizar la comunidad para transportar a la mujer hacia el hospital y las posadas son lugares que están localizados a 10 minutos y ahí las hospedan si deben tener mayor vigilancia y se les puede dar hospedaje a ella y sus familiares y se queden hasta que puedan regresar a las comunidades.

Karen Luna consideró que en Yucatán podrían organizar el sistema para que el primer nivel pueda atender partos de bajo riesgo y así no abarrotar los hospitales de segundo y tercer nivel siempre y cuando sean partos de bajo riesgo obstétrico “y esto permitiría tener más cancha para que más mujeres sean atendidas”.

Número de muertes maternas: 18 en 2015, 15 en 2016, 12 en 2017, 23 en 2018, 10 en 2019 y 20 en 2020.

Tasa de mortalidad materna (muertes maternas por cada 100 mil nacidos vivos): 51 en 2020, 19 en 2019 y 52 en 2018.

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JG