Detectan irregularidades en el DIF Quintana Roo por adquisición de juguetes

Irregularidades fiscales, precios inflados y nula información sobre la entrega, envuelven un contrato de adquisición de juguetes por parte del DIF Quintana Roo. 

El día 28 de abril del presente año la dependencia realizó un contrato  por más de 400  mil pesos por concepto de adquisición de juguetes para la celebración del Día del Niño.

Sin embargo, en las redes sociales de la institución y de la presidenta honoraria,  Gabriela Rejón de Joaquín, no se observan publicaciones que den cuenta de  la entrega de los juguetes.

El contrato fue firmado por la directora del Sistema para el Desarrollo Integral de la Familia de Quintana Roo, María Elba Elizabeth Carranza Aguirre con la empresa Mayoreo y Menudeo Peninsular SA de CV representada por Julio Cesar Araujo Enríquez, por un monto de 403 mil 975 pesos con 45 centavos.

Irregularidades fiscales en contrato

El contrato deja ver irregularidades fiscales, siendo que se le paga a la empresa el monto de 348 mil 254.70 más un IVA del 16 por ciento, por 55 mil 720.75 pesos, cuando el IVA en Quintana Roo es del 8 por ciento.

De hecho, en la tabla del anexo del contrato, aparece que se cobrará el 8 por ciento de IVA, pero prevalece la cifra de 55 mil 720.75 pesos, cuando el impuesto real por los 348 mil 254.70  debería de ser 27 mil 860.

De tal manera, se está pagando en exceso 27 mil pesos de impuestos a la empresa Mayoreo y Menudeo Peninsular SA de CV, una clara irregularidad en el pago que realiza el DIF Quintana Roo.

Precios inflados

Como parte de los juguetes comprados, se observan 10 productos diferentes, que son en su mayoría carritos eléctricos, cocinitas y casitas para niños que fluctúan sus precios en tiendas departamentales entre tres mil y cinco mil pesos; sin embargo, todos fueron contemplados a un precio de seis mil 248 pesos.

Ejemplo de ello, es el producto de una casita morada cuyo precio es de tres mil 330 pesos, lo que implica que fue comprado casi al doble de su valor. Otro caso es el carro eléctrico Prinsel Rosa que tiene un precio de tres mil 999 pesos en tiendas departamentales y fue adquirido por el DIF a seis mil 248 pesos.

Por otra parte, supuestamente se adquirieron 88 bicicletas, que tienen también precios unitarios de entre dos mil 545 y 3 mil 516 pesos, que tienen precios por encima de lo que se encuentra en las páginas de tiendas departamentales, además que por precio de mayoreo debe ser mucho menor su costo.

El contrato se firmó el 28 de abril y obligaba a la empresa a entregar los juguetes un día después, el 29 de abril, en un horario de 09:00 a 14:00 horas en una bodega de la zona industrial del poblado de Huay-Pix.

El 30 de abril, el Sistema Quintanarroense de Comunicación Social transmitió un programa con motivo del festejo del Día del Niño, el cual no tuvo amplia difusión y por lo tanto muy pocas familias supieron de este evento.

Durante la transmisión, que tuvo fallas de sonido, se observó en pantalla una gran cantidad de juguetes detrás de los conductores, entre ellos muñecos de acción, balones, pero ninguna bicicleta adquirida ni vehículos eléctricos.

Supuestamente bastaba con responder algunas preguntas mediante llamadas telefónicas, para que los niños pudieran hacerse acreedores de los regalos. Al momento de anunciar a los ganadores, se mencionaban nombres y apellidos, pero tampoco quedó clara la dinámica de entrega de los juguetes.

En los comentarios de la transmisión por redes sociales, padres de familia cuestionaron que no podían comunicarse a las líneas que se ofrecieron, a pesar que no se notó interacción mayor en este programa.

En las redes sociales del DIF Quintana Roo no se observaron publicaciones de la entrega de los juguetes que supuestamente fueron rifados y que, como se expuso anteriormente, fueron adquiridos a sobreprecios en un contrato por asignación directa firmado por su titular.

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JCL