Gobierno y sociedad, vitales para cambiar semáforo en Quintana Roo: especialista

El equilibrio y administración de riesgos es el punto de partida para decidir cambios en el semáforo epidemiológico que regula las actividades económicas, anteponiendo la salud y tomando en cuenta que los casos de contagio de COVID-19 activos no sean graves además de analizar los datos de fechas de contagio.

En entrevista exclusiva con los diarios Por Esto! el doctor Mauricio Rodríguez, profesor de la Facultad de Medicina y vocero de la Comisión de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) para el COVID-19, recomendó que en la decisión de migrar de un color a otro participe la autoridad y el sector social y ambas partes comprometerse a mantener estable el panorama.

En Quintana Roo, el 8 de junio por decisión del gobierno del estado, acabó la pausa puesta a las actividades económicas, sobre todo la del ramo turístico a pesar de éstas no figuraban en la lista de las esenciales de las autoridades de Salud federal,  pues su economía depende casi en 100 por ciento de ellas.

Desde ese día, las habitaciones hoteleras empezaron a abrir y el número de turistas que arriban a la entidad al igual que los casos positivos ha ido en aumento, pues en cuanto al número de personas que dieron positivo en el primer mes de reactivación fue de dos mil 360 y en el segundo cuatro mil 54; en junio llegaron 57 mil 419 visitantes vía aérea y al mes siguiente 322 mil 35.

"Podemos reabrir actividades y evitar casos graves de COVID-19, tener casos leves y evitar contagios, lo que es difícil es reabrir hasta que no haya contagios, porque no sé si alguien lo va a poder aguantar", reconoció el doctor de la UNAM.

Pero fue claro al decir que las decisiones de los semáforos se toman con base a los datos de las últimas dos o tres semanas y no los que están reportándose recientemente, pues en los anteriores es cuando los pacientes presentaron los primeros síntomas.

El semáforo epidemiológico funciona como elemento objetivo, medible y hasta cierto punto transparente en el que son considerados varios elementos que resumen la actividad de la epidemia, que son: cuántos casos nuevos hay, cuántos pacientes hospitalizados hay, cómo ha sido la tendencia de hospitalización de las últimas semanas, cuántas pruebas salen positivas de las que están haciendo para buscar el virus, cómo se están ocupando las camas hospitalarias de la enfermedad si son leves o graves.

Con base en el reporte de la Secretaría de Salud (SESA) de Quintana Roo, hasta ayer había tres mil 48 personas con contagios activos.

“En esta pandemia todos estamos todos en una situación nueva. Los criterios que deben utilizarse para cerrar o abrir, van en función del comportamiento de la enfermedad, si es muy contagiosa o agresiva y causa problemas hay que evitar los contagios al máximo, hay que disminuir los riesgos, como las zonas donde hay contacto cercano, mucha gente en un sitio concurrido en un sitio cerrado, esos son los sitios de mayor riesgo”, destacó.

Por Eva Murillo