Motociclista resulta lesionado tras ser atropellado por un repartidor en Progreso

Un conocido trabajador del H. Ayuntamiento de Progreso no pudo llegar a su base de labores, pues fue interceptado a bordo de su motocicleta por una camioneta de una empresa vendedora de carne, lesionándose la tibia y el peroné.

El percance se suscitó cuando Josué Álvarez Sansores de 36 años de edad viajaba a bordo de su moto Hium 2.0 con placas locales 730KPS, esto en dirección oriente a poniente sobre la calle 29 de la colonia centro, hasta que a su paso preferencial salió en la intersección con la calle  70 una camioneta Nissan con matrícula YN-0815-D.

Las consecuencias fueron devastadoras para el motociclista, pues en su desesperación por evitar la colisión, optó por girar el cuerpo, pero sin percatarse de que su pierna estaba prensada entre su moto y la camioneta repartidora, por lo que la lesión en la pierna derecha fue al instante.

Como medida, Álvarez Sansores se tiró a media calle, pero solicitando ayuda mientras se retorcía de dolor en la vía asfáltica, siendo auxiliado por los dos pasajeros del vehículo que lo colisionó y un par de agentes de la Dirección de Seguridad Pública y Tránsito. 

Al lagar también acudió su madre Lady Sansores y sus jefes de trabajo, mismos que aseguraron que el lesionado pertenece al área de mecánica de la Dirección de Servicios Públicos a cargo de Canaán Góngora Ortegón, quien otorgó facilidades para el trabajador.

A causa de los devastadores hechos que ocurrieron a lo largo del domingo, el puerto amaneció sin unidades patrulla de las organizaciones que operan en Progreso en materia de primeros auxilios y seguridad, por lo que el agraviado espero en el suelo hasta cuarenta minutos para ser atendido por el dolor crónico que le causó la colisión. 

“El error de la motocicleta fue pasar demasiado pegado a la calle donde salen los vehículos y el conductor de la camioneta con la prisa de sus diligencias nunca vio venir a la persona de la moto, es un error común en este cruzamiento” externó Eduardo Sosa, lugareño del rumbo.

Ante la presencia de peritos y allegados del motociclista la presión hizo auge en los trabajadores de la empresa de carne, terminando por hacerse cargo de los gastos por medio de su aseguradora y permaneciendo varias horas en el lugar de los hechos.

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CC