António Guterres advierte en la ONU que el planeta "ha entrado en la era del caos"

El secretario general de la ONU, António Guterres, ha emitido una contundente advertencia sobre el estado actual del mundo durante su presentación ante la Asamblea General, destacando que el planeta "ha entrado en la era del caos". 

Guterres describió la situación global como una "peligrosa e impredecible ley de la selva", donde impera la total impunidad, con amenazas que incluyen una crisis climática descontrolada, una inteligencia artificial sin regulación y unas instituciones internacionales poco representativas, además de crecientes desigualdades.

El político portugués, en su octavo año al frente de la organización, subrayó dos urgencias primordiales del sistema internacional: la reforma del Consejo de Seguridad de la ONU, afectado por divisiones, y la de las instituciones financieras internacionales, cuyo diseño favorece a los países ricos. 

Además, señaló que la mitad de la humanidad irá a elecciones este año en un contexto donde la confianza en las instituciones y el proceso político está disminuyendo.

Guterres hizo un recuento de los conflictos armados que afectan a millones de personas en todo el mundo, desde Gaza hasta los Balcanes, denunciando la falta de rendición de cuentas de algunos gobiernos y la parálisis del Consejo de Seguridad de la ONU. 

También destacó las divisiones profundizadas por discursos de odio, discriminación y extremismos, así como los desafíos como el autoritarismo, la islamofobia, el antisemitismo, el machismo y la violencia de género.

En cuanto a la pobreza y la desigualdad, Guterres resaltó que los países en desarrollo están enfrentando una crisis económica sin precedentes, con una deuda externa insostenible. 

Mientras tanto, la evolución de la Inteligencia Artificial plantea desafíos éticos y de regulación, ya que se concentra en pocas compañías y países, reproduciendo desigualdades en lugar de reducirlas.

El secretario general también abordó la crisis climática, expresando optimismo sobre el declive de los combustibles fósiles y la imparable revolución de las energías renovables. 

Sin embargo, enfatizó la necesidad urgente de limitar el calentamiento global y reducir las emisiones de gases de efecto invernadero para alcanzar los objetivos climáticos establecidos.

En última instancia, Guterres instó a la acción individual y colectiva para garantizar un futuro de paz y prosperidad para las generaciones venideras, comprometiéndose a continuar su lucha en esa dirección.

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