Se 'seca' el Río Verde de Hampolol, Campeche, por las altas temperaturas

Han pasado casi dos meses desde la última precipitación pluvial en el suelo de Campeche y esto ha empezado a resentirse en diversas comunidades donde existen cuerpos de agua natural, una de ellas es Hampolol, sitio rodeado por un río y riachuelos conocidos como “Río Verde” que hoy se encuentran con un nivel muy por debajo de lo normal, al registrar una profundidad de alrededor de 30 centímetros, cuando lo habitual mínimo es de tres metros; sin embargo, pobladores señalan que han tenido diversas etapas de “secas” pero en temporada de lluvia se vuelve a reabastecer.

De acuerdo con datos de la Comisión Nacional del Agua (Conagua) el río tiene medidas de profundidad variada, ya que hay tramos lejanos de la urbanización donde alcanza los cinco metros y otros donde apenas rebasa los tres, pero en temporada de lluvias y ciclones el caudal es sobrepasado, sin afectar a la población, pues la vivienda más cercana se ubica a casi 500 metros de distancia.

En la comunidad de Hampolol existe un río principal que está ubicado a un kilómetro de distancia, consta de casi 15 kilómetros hasta desembocar en el mar, en su trayecto forma dos ojos de agua dulce y dos ojos de agua salada de muy difícil acceso; por ser la principal arteria a su alrededor existen riachuelos que lo abastecen principalmente en épocas de lluvia.

De acuerdo con el biólogo Rodrigo Castillo, esta zona del Estado no se seca, pero los ramales de agua sí y es justo el ubicado en la localidad el que está a punto de quedarse sin agua, pues el tramo que debería tener unos tres metros de profundidad actualmente sólo tiene alrededor de 30 centímetros; el especialista refiere que “esta zona tiende a permanecer seca por mucho tiempo debido al calor pero no afecta la flora y fauna del lugar, ya que a lo largo del afluente existen zonas más profundas donde emigran las especies para sobrevivir”.

Santuario para aves

Y es que la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) considera a la comunidad de Chemblás, por donde atraviesa el riachuelo, como un “Santuario de las Aves Migratorias” por el humedal de vital importancia para la biodiversidad, pues a este sitio arriban 37 especies de aves provenientes de Estados Unidos y Canadá, pero además cuenta con 83 especies residentes.

A quienes les afecta pero no en gran medida es a los pobladores que, aprovechando los niveles altos de agua capturan una gran variedad de especies acuáticas que después comercializan en comunidades alejadas de la costa o incluso en la ciudad como un medio para obtener ingresos, pero cuando el río está bajo tienen que buscar otro recurso o incluso, algunos se internan selva adentro para pescar.

Por su parte, el encargado y director del Programa Nacional Forestal, Carlos Alejandro Tucuch Cahuich, dijo que este año, debido a los fenómenos climáticos, habrá un incremento en los puntos de calor de la Entidad que propiciarán el retraso de las lluvias y por ende, el abastecimiento de los afluentes de forma natural.

Esta situación ya es común entre los pobladores que habitan en el lugar desde hace tantos años que ya se adaptaron a los cambios climáticos y al comportamiento de la naturaleza, por lo cual establecen un estilo de vida de acuerdo a lo que aporten los recursos naturales sin descuidar su conservación, ya que es el lugar que heredarán a sus hijos y nietos y donde construyeron un patrimonio para darle vida al lugar, al estar un poco alejado de la cuidad los pobladores trabajan para que no les invada la urbanización de la capital.

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CC