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México
Lluvias intensas provocan desgajamiento de cerro en Jilotzingo, Estado de México
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Escrito por Gerardo Castro
Anuncios y obras de un nuevo desarrollo inmobiliario autodenominado la nueva Riviera de México, comienza a aparecer en la costa yucateca, causando polémica por la destrucción de manglares y deforestación de áreas naturales.
En humedales ubicados al Sur de Telchac Puerto están los preparativos para el surgimiento de la “nueva Riviera” de México: una apuesta del boom inmobiliario que pasa por alto las zonas naturales protegidas por leyes nacionales e internacionales.
La nueva Riviera de México busca explotar la costa yucateca / Saraí Manzo
En la franja Sur de Telchac Puerto se observan las primeras vías de terracería y divisiones. A orilla de la playa, luce su primer condominio cerca de los manglares, y se prepara para recibir a los miles de clientes de las distintas inmobiliarias asentadas desde las franjas limítrofes con Telchac Pueblo y Dzemul.
La zona de operación de para construir la nueva Riviera de México en Yucatán abarca desde Progreso, Dzemul, Chicxulub Pueblo, Río Lagarto, Telchac Pueblo, Dzilam de Bravo, Sinanché, Celestún, Dzidzantún, San Felipe y Hunucmá.
Se buscan construir edificios en la nueva Riviera de México en Yucatán / Saraí Manzo
En esos municipios, miles de compradores de todo México y de diversos países fueron atraídos por la burbuja inmobiliaria que sigue vendiendo la imagen de paz, tranquilidad, belleza, cultura, historia, seguridad, y crecimiento económico del estado, con la cereza de vivir “cerca de la playa”.
Inmobiliarias han promocionado esta zona como un destino que busca mantener su identidad y autenticidad mientras abraza la llegada de más servicios y comodidades, que a diferencia de otros sitios paradisíacos como la Riviera Maya, este litoral yucateco ofrece una vida más relajada y serena para quienes lo habitan o visitan.
GC
