Decepciona pesca de langosta en Litoral Oriente de Yucatán; sólo pagan 100 pesos por kilo

El panorama de la captura de langosta en los puertos del Litoral Norte y Oriente es desalentador ante la caída de los precios del crustáceo y la escama, al grado de que se está pagando a 100 pesos el kilogramo de la cola.

Esta situación ha generado que los pescadores y buceadores no se atrevan a salir al mar; tan sólo en el puerto de abrigo de Chabihau, más de 100 embarcaciones se encuentran varadas.

En el puerto de abrigo las lanchas están ancladas por la mala temporada que resienten los hombres de mar a causa de la caída del precio de la escama y la langosta. Señalan que este año ha sido más crítico comparado con el anterior a pesar del golpe que se registró a causa de la marea roja. Hasta ahora solamente cinco embarcaciones se encuentran saliendo a probar suerte en las aguas del Litoral Norte. 

Edilberto Santos, pescador, señaló que por la fuerte caída que presentó la escama después de la Semana Santa decidió retirarse del mar para realizar otra actividad. Alegó que el precio del mero rojo y negrillo ha descendido demasiado, lo que ha ocasionado que el 90 por ciento de los pescadores dejen la actividad. Señaló que actualmente el precio de esta especie se está pagando en 60 pesos el kilo, valor que no da ni para cubrir los mil pesos que se invierten por día. 

Luego de que el primero de este mes arrancó la captura de langosta en el Estado, Edilberto apuntó que los pocos ribereños que tenían la esperanza de recuperarse económicamente salieron decepcionados, pues este marisco no alcanzó buen precio en el mercado a comparación con el año pasado. Reveló que el costo de la cola del crustáceo se encuentra en 100 pesos, mientras que la grande en los 300 pesos: “Nos estaban dando un golpe duro con el precio del pescado, ahora con la langosta. El año pasado la grande se pagó en 700 pesos y la chica en 300 pesos el kilo”. 

Añadió que los compradores han estado exigiendo nuevas medidas de la langosta a los hombres de mar para que pueda pasar como ejemplar de buen tamaño, lo que ha desatado molestias por la estricta forma en la que el mercado pide el producto: “La langosta grande empieza en los 125 gramos la cola, ahora lo quieren en 150 gramos, ¿qué se va a ganar?, nada, están exigiendo, pero su precio es bien barato, no se puede”. 

A raíz de este problema que enfrenta el sector pesquero, han optado por amarrar sus embarcaciones y buscar otras actividades para realizar o ir por el producto y tenerlo únicamente para el consumo sin comercializarlo: “Si es que salen algunos, ya no lo venden, lo llevan para que consuman, se gasta más en las salidas y no se recupera nada. Nos están macheteando bastante”. 

A pesar de que el próximo mes se levanta la temporada de veda del pulpo en la Entidad, Santos comentó que no tienen expectativas de que sea una buena temporada, pues se han desatado rumores en los puertos pesqueros el octópodo podría entrar con un valor muy bajo como pasó con el mero y la langosta: “Que no hay exportación, no hay esperanzas para el pulpo. En mi caso no he arreglado mi lancha, no hay para invertir, el pescado no tiene precio y además ni hay”. 

Los pocos que se arriesgan a salir a las aguas en búsqueda de pescado por medio del palangre suelen hacer una inversión de mil pesos, y regresan a tierra con 10 kilos de especie y con ganancias de 200 a 300 pesos: “Si vamos entre tres no se puede. Cubrimos los mil de inversión y ganamos 500. Es quiebra”.

Pescadores afirmaron que realizar la actividad marina ya no resulta como en años pasados, pues al menos en este se han dado cuenta de que el mercado no ha estado pagando el precio justo como en otras temporadas lo hacía, pues que no hay mercado para exportar: “Nos pagan poco, ellos se llevan la lana después, nosotros nos rompemos el lomo en el mar para que ellos tengan más ganancia”. 

Edilberto mencionó que para los días que quedan para que comience la fiebre del pulpo, necesita por lo menos 3 mil pesos para poder realizar trabajos de mantenimiento de su lancha y dos alijos con los que acostumbra moverse cada época de captura. Hasta ahora, los hombres de mar de San Crisanto y Chabihau que conforman este puerto de abrigo mantienen abandonada la actividad, pues tienen la esperanza de la temporada del octópodo para ver si ahí puede haber mejoría o darse cuenta si los rumores son ciertos. 

Mientras que…

En el Litoral Oriente se desplomó en un 40 por ciento el valor de la langosta, pues a duras penas los empresarios pagarán de 400 a 500 pesos el kilogramo del crustáceo, ya que aseguraron que cuentan con producto en las congeladoras.

El panorama en los puertos de esta parte del Estado es desalentador debido a que esperaban que en esta temporada de captura les pagaran un precio justo por esta preciada especie, sin embargo, pensaron que sería arriba de los 700 pesos como cerró la temporada anterior.

Y que rebasaría los 940 que alcanzópero se informó que el precio máximo que tendrán las langostas será de 500 pesos siempre y cuando sea de gran tamaño.

Esto ha desanimado a varios buzos, explicó Miguel Canul, ya que por esa cantidad tienen que arriesgar su vida. La captura del crustáceo acarrea varios riesgos, entre ellos la descompresión o incluso la muerte, pero es algo que los empresarios no entienden.

El problema

La pesca ilegal es uno de los problemas que afecta al sector, no sólo de la langosta sino del mero y del pulpo. Durante todo el año los pescadores que vienen en esta parte del Estado a depredar el producto venden su pesca a los empresarios durante todo el año ocasionando que al llegar la temporada las congeladoras estén saturadas.

Lamentablemente, las leyes que rigen en la pesquería no se aplican para aquellos que todo el año y sin el permiso necesario están acabando con los recursos marinos y dejando a los demás sin el sustento.

De la misma manera el pescador señaló que los que se llevan la mayor ganancia son los empresarios que siguen vendiendo el producto a su justo valor a los países asiáticos para surtir los restaurantes.

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