Por esta razón los hermanos Campos no pueden ofrecer Paraíso Sisal

La Semarnat informó para Por Esto! que desde el 2006 se les negó la MIA a los hermanos Campos Agüero, ya que la construcción de Paraíso Sisal atenta contra el medio ambiente
miércoles, 22 de febrero de 2023 · 12:03

Hace poco, se cuestionó la construcción de Paraíso Sisal debido a la deforestación de manglares que se ha hecho para el recinto. Los responsables son los hermanos Campos Agüero, quienes siguen sin pronunciarse al respecto.

Recientemente, se compartió que se les negó desde 2006 la Manifestación de Impacto Ambiental para construir viviendas a través de la inmobiliaria Sociedad Anónima de Capital Variable de su propiedad, que lleva el mismo nombre del conjunto habitacional.

Desde febrero del 2006 hasta el 21 del mismo mes del 2023, el estado del trámite marca como no aprobado.

Semarnat 

El Sistema Nacional de Trámites de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) notifica públicamente, en orden cronológico, la diligencia de revisión de la Manifestación de Impacto Ambiental con Clave del Proyecto 31YU2006UD006, cuya copia tiene en su poder POR ESTO!

Tal expediente se abrió el 16 de febrero del 2016 con la recepción del trámite en ventanilla y concluyó el 23 de agosto del mismo año, con la entrega del resolutivo al promovente. En esta fecha se determinó: el proyecto, objeto de la evaluación que se dictamina con este instrumento, NO es ambientalmente viable, por lo tanto (la Semarnat) ha resuelto NO AUTORIZARLO (sic).

17 años antes 

La dependencia ambiental fue clara desde hace 17 años: el proyecto de los Campos atenta fatalmente contra el ecosistema en la zona costera de Sisal. Según su propuesta de urbanización (desde entonces y a la fecha) pretenden levantar 525 lotes habitacionales; hoy se sabe con cisternas y piscinas, incluso con varios niveles.

El documento entregado a la Semarnat lo detalla así: “Conforme a lo manifestado por el promovente en la MIA-P, el proyecto comprende en la primera etapa, de la apertura de dos caminos de seis metros de ancho y 4.7 Km. de longitud cada uno, así como la delimitación de 525 lotes de 10 metros de ancho por 80 metros de fondo para el caso de los que cuenten con frente de playa, mientras que los lotes sin frente de playa consistirán en terrenos de 10 metros de ancho y fondo variable entre 40 y 60 metros”.

En efecto, la dependencia federal procedió a evaluar la intención de los promoventes con base a “lo establecido en las Normas Oficiales Mexicanas: NOM-059- SEMARNAT-2001 que determina las especies y subespecies de flora y fauna silvestres terrestres y acuáticas en peligro de extinción, amenazadas y las sujetas a protección especial”; señala el documento.

En la página seis de las 12 del expediente revisado por POR ESTO!, entregado por la Semarnat como resolutivo a los promoventes, se detalla que nunca se justificó la razón por la cual el proyecto Paraíso Sisal se consideró un desarrollo urbano de baja densidad.

Los intereses económicos de estos consanguíneos, dedicados también al rubro restaurantero en Quintana Roo y Yucatán con las firmas La Recova y La Parrilla, no sólo pretenden pisotear la norma ambiental local, pues el mismo escrito de la Semarnat expone que El Palmar, no solo es de protección nacional, pues su relevancia ambiental alcanza salvaguarda internacional.

SITIO RAMSAR

En la página cuatro del resolutivo se especifica que: “México forma parte integrante del decreto de Promulgación de la Convención relativa a los humedales de Importancia Internacional Especialmente como Hábitat de Aves acuáticas y el Protocolo que la modifica, adoptadas en la ciudad de Ramsar y París, el 2 de febrero de 1971 y 3 de diciembre de 1982, publicado en el Diario Oficial de la Federación con fecha del 29 de agosto de 1986”.

En ese sentido, se añade, la Reserva Estatal El Palmar fue declarada el 27 de noviembre del 2003 como Humedal de Importancia Internacional (Ramsar) con número de registro 1328”. Un humedal se designa Sitio Ramsar por su importancia internacional bajo el Convenio de Ramsar, se otorga la denominación bajo un tratado mundial con el nombre de la ciudad iraní donde se firmó el tratado, cuyo principal objetivo es la conservación.

El Palmar fue protegido hasta que la mano de los Campos llegó a la costa de Sisal, Semarnat validó en ese año que la zona era “una de las reservas en mejores condiciones del Estado (de Yucatán)”.

Y no es para menos, pues además de las anteriores denominaciones, la zona cuenta con otro manto legal protector, también enumerado en el resolutivo de la Semarnat del 2006: El Palmar se ubica dentro del poligonal del Área Natural Protegida con Categoría de Zona sujeta a conservación ecológica en el Diario Oficial del Estado de Yucatán, con fecha del 29 de enero de 1990, sin que haya modificación a la fecha por la que pudiera levantarse hoy un complejo como Paraíso Sisal.

Es decir, los empresarios Campos Agüero pretenden pasar por alto normativas de protección ambiental específicas sobre la zona costera de Sisal en 65.72 hectáreas que quieren lotificar y construir, sobre las cuales hay mandatos de protección al menos desde hace 41 años, en años clave como 1982, 1990, 2003 y 2006.

Un sitio de naturaleza envidiable, donde animales acuáticos, aéreos y terrestres han encontrado un hábitat de supervivencia; que hoy quiere ser intercambiado por grandes residencias de descanso.

Los dueños de las firmas restauranteras La Recova y La Parrilla, con este acumularían otro presunto delito ambiental, sumado al de la semana pasada en la comisaría de San Benito, donde levantaron una barda cortando la circulación en una vía pública, en lo que se conoce como una calle blanca, es decir una artería de arena. Construcción realizada sin permiso, que fue derruida por el Ayuntamiento de Dzemul.

Síguenos en Google News y recibe la mejor información

CC