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El desalojo a una familia en los terrenos invadidos a espaldas del colegio Teresa de Ávila de Tizimín, la tarde de este jueves, casi termina en un enfrentamiento entre vecinos del afectado y elementos de la Policía Municipal y Estatal, ya que el hombre llevaba 10 años viviendo en dicho predio y hace un año presuntamente se le notificó de que sería desalojado, pero no le tomo importancia.
Datos recabados señalan que fue cerca de las once de la mañana de este jueves cuando varias unidades de la Secretaría de Seguridad Pública, Policía Municipal de Tizimín y Sucilá, llegaron al predio en cuestión, el cual está ubicado sobre la calle 49 X 12 de la colonia La Huayita, justo a espaldas del colegio Teresa de Ávila.
En breve recuento se sabe que este predio se trata del mismo que estuvo en disputa desde hace 10 años y en donde los presuntos invasores no llegaron a un acuerdo con los licenciados de los propietarios; sin embargo, dejaron pasar el tiempo o eso fue lo que hicieron creer a la gente que construyó sus viviendas en esa zona.
Pero este jueves, de acuerdo a un oficio con número de folio SSP/DJ/ME/52438/2023, llegaron los elementos mencionados junto con el licenciado Jorge David May Mazun, quien acreditó tres hectáreas de tierra como de su propiedad y se dio inicio al desalojo del tablaje catastral número 773 ubicado en la calle 12 x 49 de la colonia La Huayita.
Con la intervención de la fuerza pública, se le brindó el apoyo al actuario del Juzgado Mixto de Tizimín, licenciado Luis Alberto Lara Garrido, con el fin de dar cumplimiento a dicho procedimiento.
Vecino de los señores Reyes Kumul y Lourdes Padilla, se reunieron de manera inmediata para evitar el desalojo, pues argumentaron que la familia en cuestión vivía hace más de 10 años el predio y ha construido en él, pero lamentablemente no contaban con un documento que los acredite como propietarios.
Incluso se supo que en años anteriores habían intentado ser desalojados, pero presentaron un amparo que ya se encuentra vencido y tras un proceso legal de más de 10 años, el licenciado Jorge David May Mazun compro la propiedad que le fue adjudicada apenas el año pasado.
En su desesperación, al ver que la familia de don Reyes iba a ser desalojado, casi se inicia un conato de bronca, pero los oficiales pudieron controlar a la gente y explicarles que ellos solo cumplían con su trabajo y que esa había sido la decisión de un Juez, por lo que no quedó más opción que los ocupantes comenzaran a sacar sus pertenencias a la calle.
Sin embargo, la preocupación fue más allá hacia otros vecinos, pues se supo que la zona recuperada es de tres hectáreas y al parecer hay más predios dentro esa extensión de tierras.
Hasta cerca de las 4:30 de la tarde, agentes policiacos y personal del Juzgado Mixto de esta ciudad, se encuentran laborando en la zona para dar cumplimiento a esta orden de desalojo, ante la presencia de muchas mujeres, también la policía con elementos femeninos para su intervención en caso de ser necesario.
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GC
