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En la Encuesta Nacional de Salud Mental y Adicciones, el suicidio ya es considerado un problema de salud mental, y el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) ya se adelantó para abordar este tema con un manual al que denominó “Guía de Autoayuda para conducta suicida”, que incluye orientación y “tips” para abordar este delicado asunto.
De entrada, al lector del material, lo saluda con la frase “¡No te avergüences, no estás solo ni sola!”. El IMSS ofrece en este material información “veraz y objetiva sobre la conducta suicida, indicadores de señalamiento de alerta y habilidades de afrontamiento y prevención”.
En Yucatán el problema es grave: las estadísticas de POR ESTO!, revelan que, en lo que va del año, se han registrado 177 casos. Pero los datos del 2022, según del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) reportó 364, de los cuales 331 fueron por ahorcamiento, tres con arma de fuego, 26 envenados y cuatro por “otros” medios.
Además, Yucatán tuvo la mayor tasa estandarizada de suicidios en México, con 96.9 por ciento, dato que lo colocó en la posición número 1 en el país. De acuerdo con el Inegi, el 70 por ciento de las muertes por suicidio se asocian a problemas de salud mental, como la depresión, ansiedad, consumo de alcohol, pérdida de empleo y otros trastornos.
Respecto a la Encuesta, que está en proceso y debe concluir entre febrero y marzo del próximo año, ya busca identificar patrones suicidas en personas desde los 12 años y, por primera vez, hasta los 75 años. El trabajo lo realiza el Consejo Nacional de Salud Mental y Adicciones y el Consejo Nacional de Humanidades, Ciencias y Tecnologías.
La guía proporciona información y recomendaciones para personas con ideas o conductas suicidas. Explica que los pensamientos autodestructivos suelen estar asociados a problemas que pueden resolverse y que la mayoría de las personas en esta situación no desean morir, sino liberarse del sufrimiento.
Aconseja pedir ayuda a profesionales de salud mental y a personas de confianza. Recomienda diseñar un plan de seguridad donde se identifiquen detonantes, se eliminen medios letales y se liste información de apoyo.
Sugiere desarrollar rutinas, retomar aficiones y participar en grupos de ayuda mutua. Además, propone estrategias para afrontar problemas, distraer la mente de pensamientos negativos y recordar razones para vivir.
Indica que las crisis suicidas son pasajeras y que la recuperación lleva tiempo. Recomienda evitar el alcohol y las drogas durante estos episodios.
Proporciona los contactos de líneas telefónicas de atención psicológica como opciones para buscar apoyo. La guía busca informar y orientar a quienes atraviesan una crisis suicida.
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NM
