Institutos de la Mujer en Yucatán, herramientas para erradicar la pandemia eterna de la violencia
De acuerdo al Endireh 2021, se estima que en Yucatán el 71.4 por ciento de las mujeres de 15 años o más experimentaron algún tipo de violencia
Yucatán es la única entidad del país en tener un Instituto de la Mujer en todos sus municipios, con el objetivo de erradicar la pandemia eterna de la violencia, a los que se suman 33 Centros Regionales Violeta y dos refugios para mujeres, para que las yucatecas que necesiten resguardo por su seguridad tengan alojamiento.
La importancia es vital, la violencia contra la mujer se ha convertido en una pandemia, en un año se han llevado a cabo 93 mil servicios, entre psicológicos, jurídicos o de trabajo social; además de que se han otorgado 129 apoyos económicos a través del programa Mujeres con vivienda segura, para que renten una casa junto a sus hijos y salgan del ambiente tóxico.
La titular de la Secretaría de las Mujeres en Yucatán (Semujeres), María Cristina Castillo, señaló que desafortunadamente predomina tanto el miedo como la falta de cultura para denunciar.
De acuerdo con la Encuesta Nacional Sobre la Dinámica de las Relaciones en los Hogares (Endireh) 2021, se estima que en Yucatán el 71.4 por ciento de las mujeres de 15 años o más experimentaron algún tipo de violencia, ya sea psicológica, física, sexual, económica o patrimonial a lo largo de su vida, cifra que aumentó en los últimos seis años, ya que en el 2016 el porcentaje era de 66.8. Esta situación es más recurrente en el interior del Estado.
En Yucatán hay 2 millones 320 mil 898 habitantes, de los cuales el 50.9 son mujeres; sin embargo, las mujeres entre 15 y a 85 años son las más vulneradas en cuanto a maltrato intrafamiliar, es decir que de un millón 162 mil 419 que pertenecen a este sector, 116 mil 292 son violentadas.
María Cristina Castillo señaló que las medidas que llevan a cabo marcaron un antes y después en la manera de hacer las cosas en Yucatán en prevención y atención de la violencia contra las mujeres, pidió sumar voces y multiplicar esfuerzos para continuar con esta misión.
“Hemos trabajado para crear protocolos para la atención de las denuncias en los casos de violencia, hostigamiento o acoso en los entornos laborales. Además, tenemos programas de atención para apoyar a quienes padecen violencia doméstica y un refugio reconocido a nivel internacional por sus acciones de protección”.
“Como los institutos municipales de la mujer nos sumamos para brindar todos los programas con los que se cuentan para erradicar, sancionar e intervenir en las violencias, que son un problema multifactorial”, dijo.
Cabe señalar que los institutos municipales de la mujer se pusieron en marcha en cada uno de los 106 municipios por decreto del Gobierno del Estado, y tienen el objetivo de construir e implementar programas y acciones con perspectiva de género, derechos humanos, interculturalidad y cultura para la paz, que promuevan el desarrollo integral de las mujeres, esto mediante talleres y acompañamiento en las diferentes causas de violencia.
A su vez, los Centros Regionales Violeta, dependientes de la Semujeres, tienen como misión disminuir la reincidencia de la violencia contra las mujeres, mediante las intervenciones especializadas de trabajo social, psicología, jurídica y penal, preservando los derechos de las niñas, adolescentes y mujeres a tener una vida libre de violencia y de discriminación.
Esto 33 centros están ubicados, por el momento, en 28 municipios: Celestún, Chankom, Dzemul, Dzilam de Bravo, Espita, Halachó, Homún, Izamal, Kanasín, Maxcanú, Mayapán, Mérida, Motul, Oxkutzcab, Panabá, Peto, Progreso, Quintana Roo, Sotuta, Tahdziú, Tecoh, Tekax, Ticul, Tixcacalcupul, Tizimín, Umán, Valladolid y Yaxcabá, donde se brindan asesoría y atención gratuita y confidencial a niñas, adolescentes y mujeres que viven alguna situación de violencia.
Miriam Estrada Castillo, directora de los Centros Regionales Violeta, comentó que el más reciente fue inaugurado en septiembre del 2021 en la comunidad de Tecoh.
“A pesar de que aún es reciente ya han brindado 250 servicios entre asesoría jurídica, psicológica y de trabajo social, así como la atención a 40 mujeres de Tecoh y de municipios cercanos, como Acanceh, y parte de la estrategia es ir acercando a las mujeres de los municipios circunvecinos”, concluyó.
Estrada Castillo apuntó que ahora los centros ofrecen una atención integral, incluyendo la penal, y ya abrieron sus servicios a niñas y adolescentes, “evidentemente es un reflejo de la necesidad que hay en la región”, subrayó.
“En toda esta región, entre Tecoh y Kanasín, tenemos un alto número de mujeres que están alzando la voz, por las estrategias de prevención y las campañas de sensibilización que se están dando para que denuncien hechos de violencia”, recalcó.
Manifestó que han observado que la demanda de apoyo integral de las mujeres la mayoría de las veces coincide en municipios donde cuentan con Ministerios Públicos. Entre los centros en los que hay más demanda de servicios por parte de las mujeres están Valladolid, Tizimín, Tekax y Progreso.
El servicio más solicitado es el de asesoramiento legal y se les ofrece acompañamiento a otras instancias, así como talleres de emprendimiento para consolidar la independencia financiera y asistencia psicológica, pues suele ser un proceso complejo.
La mayoría de las usuarias de estos centros tienen entre 30 y 50 años; sin embargo, la directora subrayó que la violencia de género no tiene edad, “el hecho de que vengan más mujeres quiere decir que se están dando cuenta que lo que están viviendo no es normal y no tienen por qué sufrirlo”.
A partir de la ampliación presupuestal del Gobierno del Estado, Semujeres ha reconvertido 15 Centros de Atención y 15 Centros para el Desarrollo para adherirlos como Centros Regionales Violeta.
Han contratado a 23 profesionales, entre psicólogos, abogados y también cuentan con vehículos en caso de que las mujeres requieran algún traslado.
“Lamentablemente, en gran parte del interior del estado, sobre todo en comunidades alejadas, las mujeres continúan bajo el yugo de los hombres, ya sea porque están acostumbradas o porque se les ha inculcado por generaciones: ‘Es tu cruz’, se les dice si le tocó un marido golpeador, bebedor o maltratador, tienen que aguantarlo; por eso hay que incentivar la denuncia de las mujeres, esto únicamente se logrará de puerta en puerta y con campañas mucho más fuertes, ya que la mayoría de las mujeres de los municipios tienen miedo a sus parejas todavía”, comentó a su vez Rosa Cisneros, activista en pro de las mujeres.
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JG
